ESTÁN PASANDO COSAS: Un convento marxista, letras desaparecidas y una receta muy extraña en "Piel de Otoño"

Da gusto ver que en las telenovelas con unos años encima también se pueden encontrar cosas curiosas, sorprendentes y divertidas. En el caso de Piel de Otoño, sus noventa capítulos dejan unas cuantas que recopilo en esta entrada, libre de spoilers, faltaría más.

Cosas que, a veces, parece que han sido dejadas a posta para que los observadores como yo reparemos en ellas. Un ejemplo es la biblioteca de esta escena. Fijaos en el libro azul que se ve detrás de Lucía (Laura Flores):
Ese libro es El capital. Crítica de la economía política, de Karl Marx, en su edición del Fondo de Cultura Económica:
Quizás os parezca un libro más, pero, ojo al contexto en el que aparece, dentro de la biblioteca del despacho de una madre superiora, en un convento español:
Me gustaría saber qué opinión tendría Marx si hubiera podido ver esto. Creo que si recorriésemos los conventos de este país no encontraríamos un solo libro de Marx. Y puede que tampoco en el extranjero. Digamos que, por lo que sea, meter a Marx en un convento es un poco como si se metiera un libro de Pablo Iglesias, salvando las distancias.

En general, el atrezo de esta telenovela deja cosas muy curiosas, como estas bolsas que portan Lucía y Mayte (Yolanda Ventura) durante un paseo por Salamanca:
¿Qué tienda podrá ser DOL O OMING EZ? Venga, tirad de la ruleta, que quedan dos consonantes para resolver. Podéis comprar vocal si no se ve claro, aunque igual no hace falta.

Quizás un poco más complicado es resolver este otro enigma, el de un letrero situado en la puerta de un piso que visita, en España, Liliana (Florencia de Saracho):
ST y tres huecos por delante y otros tres por detrás. Por más vueltas que le doy, no consigo encontrar nada que encaje. Siguiendo con La ruleta de la suerte, no me digáis que no se presta para un panel de la palabra.

Dejo los concursos y me paso a la cocina, gracias a esta receta que escribe Lucía en su ordenador:
Igual no estoy muy puesto en la materia o igual he comido pocos buñuelos, pero, ¿se necesitan 15 cáscaras de tomates verdes para hacer buñuelos? ¿Y por qué verdes, si el tomate normal ya es de por sí ácido? Arguiñano, si lees esto, sácanos de la duda.

Acabo con más atrezo, el de un restaurante al que acuden varios personajes. En este caso, ahí están Eduardo (Jorge de Silva) y Claudia (Lourdes Reyes). Ojo al cartel que se lee tras ellos:
Podía cerrar con un chascarrillo sobre esas estadísticas, pero voy a dejarlo aquí.

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