Las telenovelas nos regalan localizaciones por las que es inevitable sentir una especie de flechazo, un deslumbramiento fruto de su belleza. Eso fue lo que me sucedió a mí con La Casona, la finca aceitera de los Ferrer, la familia protagonista de Fuego ardiente.
Respecto a la imagen que tenéis sobre estas palabras, os aclaro que fue extraida de la propia telenovela y que muy probablemente fue retocada para añadirle un campo interminable que en realidad no tiene y hacer aún más verosímil que este rancho se encuentra en San Carlos, en la provincia de Guaymas, Sonora, y no a las afueras de la Ciudad de México, en la localidad de Tlalpan, que es donde realmente se ubica.
Aunque por dimensiones bien podría llamarse La Casona, como en la telenovela, el rancho tiene un nombre más místico, rancho San Jorge y no, no vive, precisamente, para la producción de aceite.
El rancho San Jorge es un espacio puesto en marcha en 2017, hace cuatro años, para la celebración de eventos y banquetes. Aprovechan, para ello, los cuatro jardines de los que consta, con nombres tan sugerentes como El Picadero, el Jardín de los Secretos, el Jardín de las Cascadas o el Jardín de la Carreta –los dos últimos son los que podéis contemplar en las imágenes superiores–. En total, unos 5000 metros cuadrados gestionados por una empresa y que, hasta antes de la pandemia, albergaban bodas, celebraciones familiares y eventos publicitarios.
Desconozco si fue precisamente la pandemia lo que abrió las puertas del rancho a que se convirtiese en localización para telenovelas, pues no lo he visto en ninguna más allá de Fuego ardiente, que aprovecha los jardines y el exterior de la imponente casa de estilo mexicano. Evidentemente, el interior se recrea con decorados. Estoy convencido de que, gracias a estar en el propio DF, seguramente este rancho no tarde en aparecer en otras telenovelas.
Podéis encontrar el rancho San Jorge en Camino a Xicalco 26, San Andrés Totoltepec, Tlalpan, Ciudad de México y en Instagram, donde suben unas imágenes preciosas, algunas de las cuales ilustran esta entrada, junto a capturas de Fuego ardiente.
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