Hace dos semanas, el pasado 28 de septiembre, Telemundo estrenó Malverde, el Santo Patrón. Lo hizo tras dos años de preparativos, con cambio de protagonistas incluido, ya que, como recordaréis, Fernando Colunga iba a ser Jesús Malverde y Blanca Soto, Isabel. Finalmente, esta historia ha visto la luz con Pedro Fernández y Carolina Miranda encabezando un elenco que completan Mark Tacher, Alejandro Nones, Isabella Castillo, Claudio Roca y Luis Felipe Tovar, entre otros.
Por lo que he podido documentarme, hay mucho de mito y leyenda en torno a la figura de Jesús Malverde. ¿Existió? Hay evidencias que apuntan a que probablemente sí. ¿Fue el Robin Hood que se cree que fue? Todo parece indicar que también. Su muerte a manos de las autoridades lo convirtió en leyenda, hasta el grado de ser considerado santo y de tener altares. Podría decirse, y permitidme la broma, que Jesús Malverde siguió, en cierta manera, la estela de su tocayo Jesús de Nazaret. Sin embargo, y como también le sucede al de Nazaret, hay historiadores que sostienen que Malverde no existió y que solo fue una creación del pueblo, un mito popular.
Volviendo a Telemundo, la historia que nos quieren contar de Malverde llega para agrandar su leyenda y lo hace a partir de una serie de tramas construidas desde cero y que cuentan con una serie de libertades creativas. Una de ellas, quizás la más llamativa, es que la acción arranca en 1910, cuando quienes han pretendido documentar la vida de Jesús Malverde coinciden en que murió en 1909.
El primer capítulo nos muestra a un Malverde que bebe de la leyenda convertido en el líder de un grupo de bandidos que asaltan a los poderosos tratando de imponer su ley. En el caso de Jesús, el asalto a los poderosos va más allá de lo material, porque es también amante de la esposa de uno de los más ricos y corruptos hacendados de Sinaloa. Es allí donde transcurre la acción de este primer capítulo, en el pueblo ficticio de San Blas de Baca. Bueno, decir que transcurre la acción es mucho, ya que el primer capítulo se centra en presentar a los personajes y la acción queda reducida a tres o cuatro puntos muy concretos. No es algo que me guste, como alguna vez os he comentado, pero si encima sucede en una telenovela de época, la sensación es aún peor. El capítulo dura 53 minutos y puede ser uno de los que más me haya costado ver, de hecho tengo la sensación de que duraba el doble, porque ya os digo que se echan en falta más acción y más ritmo. Aun así, confío en Luis Zelkowicz, su creador, que ha demostrado su talento con creces en los siete años de El Señor de los Cielos, con El Chema de por medio.
El elenco defiende bastante bien este proyecto, aunque sigo pensando que Malverde debió haber sido alguien más joven que Colunga o Pedro Fernández, aun así cumple y no desentona. Me ha gustado mucho Luis Felipe Tovar, que las tiene todas a su favor para ofrecer un gran villano. Muy buen trabajo el de Carolina Miranda y Mark Tacher, como Isabel y Vicente, un matrimonio construido bajo la sombra de Malverde, el gran amor de Isabel. Tampoco me han disgustado Aleandro Nones, Claudio Roca y Salvador Sánchez, que se encargan de dar vida a los hermanos y el padre de Isabel.
Uno de los argumentos que más han usado el elenco y la propia Telemundo a la hora de promocionarla es que se construyó un poblado para rodarla y que, con ello, se invirtieron unos cuantos cientos de miles de dólares.
El resultado de esa inversión merece la pena, porque han hecho cosas muy logradas y San Blas de Baca parece un lugar tan real como algunas de las localizaciones que se ven en este primer capítulo. Muy bien también el vestuario y la iluminación, muy natural incluso cuando se graba en alguno de los decorados que dan forma a San Blas de Baca.
Otro de los argumentos de promoción sobre Malverde es que, y cito textualmente, es la "primera superserie de época de Telemundo". Ya sabéis todo esto que se traen en Telemundo a la hora de series y superseries, y siguiendo con esa clasificación, me gustaría preguntarles dónde quedan Camelia la Texana y El Barón, dos productos que vendieron como superseries y que se ambientaban en los años 70 y 80. ¿No eran superseries de época también? Más allá del concepto de superserie, el argumento lleva a pensar que Telemundo nunca ha hecho nada de época y cabe recordar que en su archivo constan ejemplos como Los Plateados, con Argos, ambientada a comienzos del siglo XX, si mal no recuerdo, o El Zorro, con RTI y Sony, que se trasladaba a la antigua ciudad de Nuestra Señora de los Ángeles, en plena época colonial. Habría que ver cuánto se invirtió en cada una de ellas para comprobar si, conforme al criterio actual, no merecerían también entrar en la categoría de superseries.
Termino este primer vistazo con un último apunte sobre algo que me llamó la atención, un caso de censura un tanto particular y que no acabo de entender. Siempre que aparece la palabra indio (en masculino, femenino, singular o plural), se censura.
No entiendo por qué, si según la RAE, el uso que hacen de la palabra en la historia es solo para referirse a los "pueblos o razas indígenas de América", aunque a veces la palabra se use con cierta connotación despectiva, puesta en boca de los adinerados, una connotación que es en cierto modo lógica, dado el contexto histórico y social que envuelve las tramas. No alcanzo a comprender la razón de esta censura, ya que, por esa regla de tres, si Telemundo decidiese repetir su telenovela Gitanas, también debería censurar el título, al referirse a las mujeres de un pueblo o etnia, como hacen con indio.
Tenía pensado verla, pero me esperaré un poco, a ver qué críticas recibe y cómo le va en Estados Unidos, donde ha debutado discreta, con un millón de espectadores.
¿Hay por aquí alguien que la esté llevando al día y pueda contarnos qué tal está?
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