HABLEMOS DE SERIES, aunque solo este fin de semana (I)

Siempre que llegan estas fechas os digo lo mismo, pero es así. Del 6 al 10 de diciembre son los peores días para bloguear desde España. Coinciden dos fiestas nacionales, casi seguidas (una el 6 y otra el 8) y todo el mundo se las arregla para hacerse puentes de tres, cuatro o hasta cinco días.
Lo que comenzó hace un par de años como un experimento para cubrir un día de este puente, ha pasado a ser una especie de tradición para mí y para algunos de vosotros que me habéis preguntado por esa entrada que cada año dedico a comentaros las series que he visto. Bien, este año no será uno, sino que serán dos los artículos en los que os hablaré de las series que vi en los últimos 365 días.


Cuerpo de élite (MOD Producciones para Atresmedia, 2018)

Comencé el año con esta comedia, inspirada en la película del mismo nombre que arrasó en las taquillas españolas en el 2016 y que yo no había visto.
¿De qué va? Cinco agentes de distintos cuerpos de seguridad son reclutados por el Gobierno español para configurar un nuevo Cuerpo de Élite, secreto y encargado de las misiones más delicadas, aquellas que comprometen la seguridad nacional. Sin embargo, el proceso de selección no es que vaya muy allá y al final acaban formando parte del cuerpo cinco personas provenientes de distintos puntos de España con trayectorias muy diferentes y que son un tanto peculiares.
Me puse a ver la serie atraído más por el elenco que por otra cosa. En general los personajes, y en especial los cinco agentes protagonistas, están llevados a un extremo totalmente cómico-paródico. De esos cinco agentes, me han gustado Cristina Castaño y Canco Rodríguez. A Octavi Pujades lo he visto un poco forzado y lo mismo puedo decir de Adriana Torrebejano y de Álvaro Fontalba.
A nivel de personajes, yo me quedo sin duda alguna con los secundarios que en mi opinión han brillado mucho más que los propios agentes. Antonio Garrido, Ana Morgade, María Botto, Ismael Martínez, Joaquín Reyes y El Langui se lucen como Efe, Montse, Andrea, Iñaki, Julián y Ramón, respectivamente.  Las tramas favorecen a este grupo de actores y actrices, con los continuos tiras y aflojas entre Montse y Efe, la relación que surge entre Andrea e Iñaki o las tretas políticas del ministro Julián Ocaña y el líder de la oposición Ramón Carreño.
Los secundarios y sus tramas son mucho más interesantes, tienen más ritmo y hacen mucha más gracia que las misiones y las tramas personales de los agentes, qué queréis que os diga. De estas últimas solo salvaría las pullitas que se lanzan a determinados personajes de la vida pública, como Maduro, la baronesa Thyssen o la familia real española. Lo demás es totalmente prescindible, excepto alguna misión como la del Cloacabus, la que involucra a la líder del Pubis y poco más.
La serie tiene trece capítulos y no tendrá más tras una trayectoria descendente en términos de audiencia. La película esta en Neflix, pero la serie no, al menos por ahora.


La casa de papel (Vancouver Media para Atresmedia, 2017)

Pasé ganas de verla cuando se emitió en España, entre enero y diciembre de 2017. Sin embargo, no pude hacerlo. Para los que no lo sepáis, en Antena 3, la cadena que sacó adelante el proyecto, se emitió dividida en dos partes, una primera, de siete capítulos, de mayo a julio, y otra, de ocho, de septiembre a noviembre. La primera tuvo una audiencia soberbia; la segunda pasó sin pena ni gloria. 
El éxito que tuvo a nivel internacional gracias a Netflix la devolvió a un primer plano, provocando que muchos que no la habíamos visto nos animásemos a hacerlo. Me encantó y entendí, además, por qué ese éxito internacional: La casa de papel es una serie que se presta a un consumo lineal, por maratones de capítulos, que es como muchos la han visto. De hecho, parece pensada para eso y no para ser emitida semanalmente y con ese parón de meses con el que se emitió en España.
La historia atrapa, al igual que el atraco y ese marco temporal de apenas cinco días en el que se desarrolla. Tiene un poco de todo, desde acción a misterio, pasando por romance y denuncia social referida a lo que los bancos y quienes mueven el dinero se han encargado de hacer con él y los ciudadanos de a pie durante los últimos años.
Es una serie que se ve muy planeada, en la que sus guionistas lo han pensado todo y han procurado que no quede un solo cabo suelto. El elenco y su impecable trabajo –en especial Álvaro Morte e Itziar Ituño– han sido también claves en hacer de esta serie un fenómeno mundial galardonado incluso con un Emmy, el primero para una serie española
Ahora bien, ¿era necesaria una nueva temporada, que ya se está rodando? Habrá que esperar hasta que se estrene, pero tal y como termina, con un final pensado como final de serie, yo la veo innecesaria. 

La catedral del mar (Diagonal TV para Atresmedia, TV3 y Netflix, 2017)

Se anunció como una de las grandes y más caras series producidas en España. No lo discuto. Sin embargo, lo fuese o no, lo que no se puede hacer es lo que Antena 3 hizo con ella: comenzar a emitirla en mayo y terminarla en pleno verano.
Para quienes no lo sepáis, La catedral del mar es la versión en formato serie de ocho capítulos de la novela del mismo nombre, un superventas firmado por el abogado y escritor catalán Ildefonso Falcones.
Yo leí la novela cuando arrasó en ventas, allá por el 2010 o 2011.  Es por eso por lo que tuve que echar algún vistazo a sus páginas para ver si la serie era fiel o no al texto original, ya que no me acordaba de muchas cosas. Os puedo decir que sí, que la serie es muy fiel  a la novela, aunque se toma pequeñas libertades respecto de algunos personajes.
La serie está muy bien hecha, las cosas como son. Lo único que se le puede echar en cara es el abuso que hacen de esos filtros con los que pretenden evocar la Edad Media, la época en la que transcurre la historia. Filtros que oscurecen la imagen y que hacen que el espectador se pierda muchos detalles. A nivel argumental, se nota que toma por base una novela muy bien documentada, con ritmo y con unos personajes principales muy bien definidos. El elenco está correcto, en líneas generales. Brillan Pablo Derqui, Ginés García-Millán y Nathalie Poza. El resto bien, pero hasta ahí. Aitor Luna, el protagonista, convence por momentos: hay escenas en las que se le ve que le falta soltura y otras en las que más o menos cumple. Disponible desde hace unos meses en Netflix.

Fugitiva (Grupo Ganga para TVE, 2017)

Lectores habituales del blog, estaos tranquilos. No voy a repetir lo que ya dije de esta serie en uno de los especiales Hablemos de tele que publiqué en agosto. Os remito a la crítica que ya le hice. Una pena de serie, teniendo en cuenta lo que pudo ser… y lo que al final terminó siendo.

Mañana más. 

Comentarios

AlexAyaoiHD ha dicho que…
Pues yo de la lista, solo he visto Cuerpo de élite y a mi si me parecieron algo interesantes algunos de los agentes, o mejor dicho alguna pareja formada y además que pienso que ha sido algo fresco y digno de tener una 2ª temporada de otros 13 - 14 capítulos que cierre la historia. Actualmente veo la t2 de Estoy Vivo y sigo 3 americanas, .Embrujadas Reboot, Supergirl y Outlander.
GAFEMO ha dicho que…
Hola, Alex:

Lo de los agentes era un poco de traca. Quisieron llevarlos a un extremo paródico y se pasaron. Sí que es cierto, que viendo la poquísima comedia que se hace, era algo fresco. ¿Una segunda temporada? Podían haberlo intentado con una fórmula del tipo de la que usaron para esta primera: rodar ocho capítulos, esperar a ver cómo funcionan y, si acaso, encargar otros cinco. Pero realmente, tampoco se me hace necesario, no sé. Tal y como la terminaron, creo que estuvo bien.

Un saludo!