Entre los muchos caminos que el género ha comenzado a seguir en los últimos años se
encuentra uno que a mí no deja de sorprenderme: hacer remakes en formato telenovela de series estadounidenses muy
conocidas. Es una senda que en Colombia ha tenido diversos hitos como A corazón abierto (remake de Anatomía de Grey), Metástasis (versión de Breaking Bad), Venganza (basada en Revenge)
o Hermanos y hermanas (que parte de Brothers and sisters). Siempre quise ver
alguno de estos remakes, pero por una
razón o por otra, nunca me había sido posible. Nunca, hasta que en junio de
este año me puse con Hermanos y hermanas,
estrenada por RCN en octubre de 2017 y de la que Lucía Dasilva me había hablado
muy bien. La terminé unos tres meses más tarde. Aquí tenéis mi crítica de esta
historia.
[¡CUIDADO! Si
estás viendo esta telenovela o tienes pensado hacerlo, quizás no deberías leer
esta crítica. Puede contener spoilers que hacen aconsejable su
lectura después de haber visto la historia].
SINOPSIS
Guillermo
Soto (Luis Fernando Montoya) y Nora Matiz (Helena Mallarino) llevan casi
cuarenta años casados. Han tenido cinco hijos: Sara (Natasha Klauss), Tomás
(Andrés Toro), Camilo (Juan Fernando Sánchez), Catalina (Verónica Orozco) y
Lucas (José Restrepo). Juntos, Guillermo y Nora han disfrutado del éxito en los
negocios gracias a Expofrutas, la empresa familiar que ellos se encargaron de
levantar.
Mientras
los Soto Matiz y sus hijos celebran su aniversario de bodas, Guillermo sufre un
infarto y muere. La familia descubre unos días más tarde que Soto mantenía una
relación extramatrimonial desde hace dos décadas con Consuelo (Katherine
Vélez), una mujer más joven que Nora con la que tuvo también una hija, Rebeca
(Estefanía Godoy). No es lo único que sale a la luz tras el fallecimiento de
Guillermo: el patriarca había realizado sendas inversiones de riesgo,
comprometiendo la estabilidad económica de Expofrutas y, por ende, el futuro de
su familia.
Esta
situación unirá aún más a los hermanos Soto Matiz, con Sara, Tomás y Camilo
luchando por sacar adelante la empresa y con Nora dispuesta a disfrutar de su
nueva vida después de cuatro décadas de un matrimonio que no era ni mucho menos
tan perfecto como ella imaginaba.
TRÁILER
FICHA
TÉCNICA
Colombia.
RCN y Vista Producciones, 2014*.
82
capítulos**
PRODUCTOR EJECUTIVO: Jaime Sánchez Cristo.
GUION: Cecilia Percy, Aura Niño y Rodrigo
Holguín.
DIRECCIÓN: Carlos Cock y Sergio Osorio.
Emitida
en Colombia entre el 12 de septiembre de 2017 y el 10 de enero de 2018
*Según la web de Vista
Producciones, se rodó en el 2014. Otros medios apuntan a 2017.
**RCN emitió 82
capítulos, recortando los últimos episodios. Vista Producciones señala en su
web que la comercializa con 80 capítulos. Desconozco el número exacto de
capítulos con los que cuenta.
PERSONAJES Y ACTUACIONES
Hermanos y hermanas es una telenovela con un reparto
relativamente pequeño y centrado en la familia protagonista de esta historia.
Juan Fernando Sánchez, Verónica Orozco, José Restrepo,
Helena Mallarino, Natasha Klauss y Andrés Toro, en una foto de familia.
Helena
Mallarino encabeza ese elenco interpretando a Nora. Es un personajazo que tiene
de todo, desde momentos muy cómicos a escenas de lo más dramáticas. Solo una
gran actriz de la talla de Helena Mallarino podría sacar adelante una mujer
como esta, a la que le pasa de todo, cosas buenas y malas, a lo largo de la
historia. Es una madraza, pero también una ama de casa que descubre el mundo
tras la muerte de su marido y que decide a luchar por superarse y por aprender
cosas, todo ello sin cerrarse al amor, pese a que su matrimonio tuviese unos
cuantos claroscuros. Es un personaje que como todos los de la telenovela está
muy humanizado, que siente y padece como cualquiera de nosotros. Me ha
encantando Nora y Helena puede estar orgullosa, porque ha hecho un trabajo de
matrícula de honor.
Natasha
Klauss es Sara, la hija mayor de Nora y Guillermo, una mujer muy estricta en su
vida personal y profesional, exigente también con quienes la rodean, cuyo
carácter cambia conforme la historia avanza y van pasándole cosas. He
disfrutado mucho con Sara, tanto como Natasha, porque se le nota muchísimo que
se lo pasó en grande con este personaje y todo lo que le ocurre. Lleva a Sara
con una naturalidad enorme y demostrando que le sobran tablas para protagonizar,
pese a que en los últimos años la han tenido haciendo secundarios.
Siguiendo
con los hermanos de mayor a menor, el siguiente es Andrés Toro, que interpreta
a Tomás, un hombre de campo, mucho más tranquilo que Sara y también más
pasional. No conocía a Andrés y me ha gustado. Es un actor muy natural y que
sabe hacer de Tomás un personaje que cae bien, aun cuando tenga una forma de
pensar un tanto anticuada en lo que a ciertos temas se refiere, como la
homosexualidad del tercero de los hermanos, Camilo. Juan Fernando Sánchez se
ocupa de este personaje, un abogado que vive su orientación sexual de una forma
un tanto reprimida hasta que poco a poco se decide a disfrutarla, enfrentando
también las reacciones que ello provoca en su círculo familiar y profesional.
Tampoco conocía a Juan Fernando, que ha hecho un trabajo magnífico con un
personaje que se aleja de los tópicos que normalmente se ven en las telenovelas
que cuentan con un personaje gay, asociados casi siempre a la comedia, con
roles de diseñadores, asistentes o similares.
Verónica
Orozco es Catalina, la siguiente hermana, un poco menor que Camilo. No puedo
ser objetivo con Verónica, que sabéis que me encanta y a la que sigo desde que
la descubrí en Anónima.
Catalina es una periodista comprometida, pero también una joven enamoradiza y
dicharachera que pierde más que gana fijándose en un hombre que pienso que no le conviene.
Catalina
es la confidente de Lucas, el más pequeño de los hermanos. José Restrepo da
vida a este joven veinteañero que es uno de los personajes más interesantes de
la telenovela y también uno de los que más sufre, en buena medida por sus
adicciones al alcohol y las drogas. José es otro descubrimiento que me deja
esta historia y estoy convencido de que tendrá un gran futuro en el género o
fuera de él, ya que pese a su juventud ha sido capaz de sacar adelante sin
problemas un personaje muy complejo y cargado de altibajos.
El
feeling que tienen estos cinco actores entre sí y con Helena hace que el
espectador vea una familia, porque realmente parecen hermanos. Puede pareceros una
tontería, pero es algo que no siempre se logra, y menos cuando una familia
tiene tantos miembros como la Soto Matiz.
Jairo Camargo y Katherine Vélez interpretan a Saúl y Consuelo
Los
otros dos personajes son Consuelo y Rebeca, la amante y la hija
extramatrimonial de Guillermo Soto, respectivamente. Katherine Vélez interpreta
a Consuelo, una mujer que no es una mala persona, ni mucho menos una villana.
Simplemente cometió el error de enamorarse de un hombre casado siendo apenas
una veinteañera. Pese a su dilatada carrera, he conocido a Katherine en esta
historia. Me reí y sufrí mucho con Consuelo, porque es otro de los personajes a
los que les pasa de todo y con el que se empatiza mucho gracias al magnífico
trabajo de Katherine. Tiene también una gran química con su hija en la ficción,
Estefanía Godoy, una joven a la que tampoco conocía y que defiende sin
problemas un personaje muy interesante, complejo y maduro para la edad –muy
aproximada a la de Lucas– que tiene Rebeca.
Patrick Delmas y Rodrigo Candamil son Alejandro y Juan Carlos
En
el entorno de los Soto Matiz aparecen muchos personajes, directamente
relacionados con la familia o con alguno de sus miembros. Es el caso de
Alejandro, un exitoso periodista que se convierte en el jefe y gran amor de
Catalina. Patrick Delmas se mete en la piel de este personaje, que en un primer
momento cae mal, por lo soberbio y engreído que es, pero que luego comienza a
caer mejor, aunque en algunas ocasiones llegue a pecar de ingenuo. Patrick ha
hecho un buen trabajo pese a que tiene que mejorar su dicción porque hay veces
en las que cuesta entenderlo, ya que es un actor franco-colombiano y tiene un
marcado acento francés que al entrar en contacto con la fonética del español
queda muy raro, muy forzado. Debo comentar que en ningún momento se nos dice
que Alejandro tenga origen francés o se dé al espectador algo que justifique
que Alejandro tenga ese marcado acento francés.
Cerca
de Sara, muy cerca en ocasiones, está Juan Carlos, su marido, interpretado por
Rodrigo Candamil, que se luce con un personaje que es un soñador nato y en
general, todo lo contrario a su mujer. Cuesta entender que lleven casados más
de quince años y que hayan tenido una hija, María Paz, a la que da vida Laura
Torres, una joven que me ha gustado mucho y que en la historia vive un romance
muy de adolescentes con Sebastián, el hijo de Alejandro, del que se ocupa
Francisco Restrepo, otra cara nueva con talento.
Otros
personajes cercanos a la familia son Martín, el gran amor de Camilo, muy bien
interpretado por Rashed Estefenn; Julia, una campesina y amiga de la infancia
de la que se enamora Tomás, a la que da vida Adriana Silva; Sofía, la alocada y
simpática amiga experta en yoga de Nora, un personaje que corre por cuenta de la
gran Marcela Agudelo; o Emilio, el director del canal en el que trabaja
Catalina. De él se encarga Alberto Pujol y
es un personaje tan cómico que es inevitable no reírse a carcajadas con
algunas de las cosas que le pasan.
Hermanos y hermanas fue también una de las últimas
producciones en las que participó Luis Fernando Montoya. El intérprete, que dio
vida a Guillermo Soto, falleció hace unos meses a los 61 años, víctima de
cáncer.
[PERSONAJES
y ACTUACIONES: 1,8/2]
TRAMAS
No
vi Brothers and sisters, por lo que
no puedo entrar a valorar si Hermanos y
hermanas es o no una adaptación fiel de la serie. Me gustaría también que
se tomen con cautela algunas de las cosas que os voy a contar, ya que los
últimos capítulos emitidos por RCN están editados y hay recortes. No sé cuál es
la cifra exacta de episodios que se rodaron, pero calculo que ronden los 90-95,
frente a los 82 emitidos en el canal colombiano. Aclarado esto, voy con el
análisis de las tramas.
Los Soto Matiz, reunidos en Expofrutas
Esta telenovela es una de las más corales que recuerdo: Nora y sus hijos son los protagonistas, con un reparto muy equitativo en lo que a tramas se refiere para cada uno de los seis personajes. Es difícil elegir o destacar alguna trama en concreto, porque todas tienen su punto. Me encantó cómo Nora se reinventa gracias al apoyo de sus hijos y de su amiga Sofía después de enviudar.
A la izquierda, Nora y Sofía, en clases de Fotografía; a la derecha, Sara, trabajando con sus socios
Disfruté mucho con Sara y el giro que da a su vida tras divorciarse y sufrir un descalabro amoroso que le lleva también a renacer como empresaria, de la mano de un proyecto y unos socios que han permitido a la historia hablar de ecología y del daño que estamos haciendo al planeta. A través de Andrés se ha mostrado una vez más eso de que el amor no entiende de clases sociales o convenciones, como muestra su historia con Julia.
Tomás y Julia, besándose en una escena y Camilo y Martín, charlando en otra
Camilo ha permitido mostrar al espectador lo complicado que es para muchos homosexules enfrentarse a un mundo que todavía tiene mucho de arcaico, sufriendo desde el rechazo de algunos miembros de su familia hasta discriminación y homofobia en su trabajo. Mediante Catalina y el tipo de periodismo que hace se han abordado temas como la pederastia, la homosexualidad entre miembros de la Iglesia o la explotación de menores en las minas colombianas. De los cinco hermanos puede que Catalina sea la que tiene tramas menos jugosas, ligadas demasiado a Alejandro, un personaje que le resta más que aporta. Con Lucas, el menor de los Soto Matiz se han tratado sin tapujos, sin caer en morbos o exageraciones, temas espinosos como el consumo de drogas y los efectos que ello tiene tanto en quien las consume como en su familia y amigos.
Catalina y Alejandro viven una relación rara; Lucas, a la derecha, tras consumir drogas
Aunque la telenovela tenga estas y otras tramas inspiradas en el mundo real, algunas de ellas incluso novedosas, y los personajes estén muy humanizados, no faltan temas y situaciones muy trilladas en este género. El punto de partida es una de ellas: Guillermo Soto tenía una amante desde hacía veinte años e incluso había tenido una hija con él. A lo largo de la telenovela se plantean otras tramas que a día de hoy resultan un poco rancias: Luisa, la mujer de Alejandro le es infiel, se queda embarazada y sin saber si es de su amante o de su marido, utiliza su estado para evitar que su esposo se vaya con Catalina. Por cierto, Alejandro le es infiel a su mujer con Catalina (y seguramente con alguna otra antes que con ella) pero monta en cólera cuando sabe que Luisa ha tenido algo con un compañero de trabajo. Un pelín curiosa esa doble vara de medir, ¿no?
Hay
también un romance de esos que a priori parecen imposibles, porque los
enamorados son hermanos… o eso parece. De estas tramas así clasiconas, esta es, para mí, la que mejor se resuelve, con un giro
que no es que sea muy novedoso, pero que está bastante bien llevado.
En
general y pese a que el espectro argumental es amplio, las tramas se
desarrollan con buen ritmo y unos cuantos giros interesantes, hasta llegar a un
final cerrado y en el que los recortes abundan. También tiene unos cuantos
saltos temporales no señalizados. Aun así, se entiende más o menos bien, aunque
haya cosas raras, como que Sara aparezca de viaje buscando a su novio sin que
se nos explique por qué se distanciaron o se nos muestre a Nora emparejada con
otro personaje sin habernos mostrado un romance o algo previo. En ese final
quedan en el aire dos cosas, que imagino que hayan quedado así por la edición.
La primera es curiosa, porque en una escena se asegura que un personaje que
padece cáncer está desahuciado. Sin embargo, no se muestra la muerte de ese
personaje y en su última escena aparece feliz, cantando y bailando. ¿Para qué
soltar eso si el personaje no se iba a morir? Imagino que grabaron la muerte y
la dejaron fuera de ese montaje tan apresurado. La segunda es rara, porque en
los últimos capítulos se dan indicios de que Flor, la asistenta de los Soto
Matiz, puede tener alzhéimer. Sin embargo, no se vuelve a saber nada más de
ello y apenas se la ve en la celebración con la que prácticamente termina la
historia. Una celebración, por cierto, muy novedosa para lo que es habitual en
el género: Hermanos y hermanas cuenta
en su último capítulo con una boda gay. Un final que es novedoso, pero que no debería serlo. En un género en el que el amor es uno de los temas fundamentales, deberían verse más parejas y matrimonios entre personas del mismo sexo, como en la sociedad misma.
Detalle de la tarta nupcial de esa celebración con la que termina la historia
La telenovela no está exenta de errores argumentales. En el primer capítulo se deja ver que Saúl sabía de la relación entre Consuelo y Guillermo. Vale que Saúl y Guillermo eran muy amigos, pero… ¿tanto como para que Saúl, con lo que quiere a su hermana Nora, se callase durante tantos años la doble vida de su cuñado?
Hay
también personajes que desaparecen sin causa alguna, como Adolfo, un hombre
importante para Nora. Es curioso también que en un capítulo celebren que
Catalina y Rebeca cumplen años el mismo día, el 29 de septiembre, para ser
exactos, pero que hacia el final Rebeca afirme que cumple años “en marzo”. Y si
esto es curioso, también hay algo inquietante: en un capítulo a Nora le aparece
una sobrina. De hecho asiste a esa fiesta de cumpleaños que organizan para
Catalina y Rebeca. ¿Cómo puede tener Nora una sobrina si en otro episodio
afirma que tiene un único hermano, Saúl, y este no tiene hijos ni se ha casado
nunca? Es exactamente igual que lo de Mauricio y La Macu en la serie española Aída.
La Macu era sobrina de Mauricio pero
este tenía un solo hermano que era homosexual y casi tan joven como La Macu.
Volviendo
a Hermanos y hermanas, existen
también pequeñas confusiones en los diálogos, como que Catalina se refiera a la
tienda de Consuelo y Andrés como “La Morita”, cuando en realidad se llama Doña
Fruta (La Morita era la tienda que Consuelo tenía en solitario) o un error muy
divertido que tiene Helena Mallarino y que saldrá en el apartado de los
gazapos. Lo enlazaré a esta entrada cuando aparezca publicado.
Al
estar rodada en 2014 hay una referencia a los Premios Príncipe de Asturias, que
choca, ya que desde su edición de 2015 son los Premios Princesa de Asturias. Es
lo que tiene rodar una telenovela y guardarla en un cajón más de tres años, que
hay cosas, por pequeñas que sean, que quedan desfasadas.
[TRAMAS: 4/5]
MÁS COSAS
Se
presentó a los medios como una de las primeras telenovelas íntegramente rodadas
en formato cinematográfico y se nota en el resultado final. La realización es
estupenda y la dirección no tiene nada que reprochar.
En
lo que a escenarios se refiere, existe en ella un reparto bastante equitativo
entre localizaciones y decorados. Entre las primeras, la finca de Tomás, la
casa tan vanguardista de Sara, usada tanto en su interior como en su exterior,
o la casa de los Soto Matiz, cuyas estancias se recrean con decorados.
La casa de los Soto Matiz y su exterior, recreado con decorados
Mediante
decorados se recrean también las dependencias del Canal Red Nacional, en el que
trabaja Catalina, o las oficinas de Expofrutas. Mientras que las localizaciones
están muy bien escogidas, en el caso de los decorados hay de todo un poco. Me
gustan los de la casa de la familia, uno de los pocos casos que recuerdo en los
que los decorados se ajustan al tamaño real de la casa que cuyo interior
pretenden recrear; los del canal están bien, aunque abusan de colores un poco
chillones, y los de Expofrutas dan pena y se ven muy acartonados, las cosas
como son. En estos y otros decorados se utilizan chromas para representar aquello que se ve por las ventanas o las
puertas, cuando están abiertas. No es fácil manejar el chroma, pero han sabido hacerlo. Por cierto, aunque no sea un chroma, tengo que decirlo: me encanta la
pantalla de proyecciones que tiene Nora en su salón. Quiero una.
Os
hablaba en el apartado de los personajes de cómo evolucionan según avanza la
historia y se relacionan con otros. Esa evolución en sus formas de ser tiene su
correlativo en el vestuario de muchos de ellos y es algo que particularmente a
mí me ha gustado: Nora pasa de tonos oscuros a tonos más claros y prendas más
modernas, conforme va asumiendo que ha enviudado y que puede dar un giro
interesante a su vida. Lo mismo le ocurre a Sara tras divorciarse o a Camilo
tras dar a conocer su orientación sexual y decidirse a vivirla libremente.
Hermanos y hermanas es una telenovela con una banda
sonora muy reducida, limitada a un par de temas cuyos autores e intérpretes
desconozco y que son Te amaba y el
que yo he bautizado como El dolor de tu
partida. Este último es el que más se escucha, una balada muy bonita que
resume lo que se siente cuando alguien cercano fallece:
Los
instrumentales están muy bien, con muchos toques de saxo que recuerdan en
cierta forma que esta es una telenovela basada en una serie estadounidense.
Terminaría
diciendo que me alegra haber escuchado ciertas palabras malsonantes como puta, maricón, joder o alguna
más, pero claro, teniendo en cuenta lo que han hecho con la edición de los
últimos capítulos, que hayan respetado los tacos pasa a ser algo casi anecdótico.
[MÁS
COSAS: 2,8/3]
Recuerdo
que cuando comencé a verla algunos de vosotros me comentasteis que la serie en
la que se basa era una serie más de personajes que de tramas. Hermanos y
hermanas es una telenovela de personajes y de tramas. Personajes a los que se
les coge cariño, gracias en buena medida al gran trabajo de un elenco impecable
en el que brillan Helena Mallarino y sus cinco hijos, que perfectamente podrían pasar como una familia real. La
telenovela cuenta con un buen guion y un ritmo narrativo óptimo, aunque haya
cosas muy clásicas y otras que no cuadran, como ya os he comentado.
Pese
a ello, se atreve a romper esquemas hablando abiertamente de drogas o de la homofobia,
entre otros muchos temas inspirados en la vida misma. Entretiene y con la
realización tan magnífica que tiene se disfruta mucho viéndola.
Es
una pena lo de la edición de sus últimos capítulos.
PUNTUACIÓN
FINAL: 8,6
Comentarios
Hablando de Hermanos y hermanas la verdad es que fue una pena que en los últimos capítulos la recortaran tanto porque había cosas que no llegaban a enterderse. A mi amiga y a mi nos encantaba el personaje de Verónica y la pareja que hacia con Patrick Delmas.
Por cierto, todos los remakes que nombras en esta entrada justo los tengo yo en mi disco duro para verlas.
Es cierto. Vaya cruce de 'remakes' que he hecho así a lo tonto. Ya lo he corregido. De "A corazón abierto" vi uno o dos capítulos, los que emitieron en Nova un finde por la tarde hace como ocho años. Luego la pasaron a primerísima hora de la mañana y desapareció poco después. En aquel entonces sí que la busqué por internet, pero no di con los capítulos. Y ahí se quedó.
Coincido contigo en lo del recorte. Totalmente injusto, porque aunque no funcionase, ya que la habían "aguantado" unos cuantos meses, ¿qué más les daba tenerla en parrilla una semana o dos más y emitirla tal y como se grabó?
El personaje de Verónica está bien, pero la historia de Catalina y Alejandro... No sé, yo soy Catalina y lo hubiese mandado a paseo unas cuantas veces. Comienza siendo un jeta, luego cae en las mentiras de Luisa y peca hasta de tonto y al final, hace ahí un sacrificio que le redime un poco pero tampoco es para pasarse. Siendo sincero, yo hubiese preferido que Catalina le diese una segunda oportunidad a Daniel.
Tampoco entiendo que esta telenovela, tan coral como es, termine con una escena de Cata y Alejandro. No sé si es porque también ahí ha habido recortes, pero "Hermanos y hermanas" merecía terminar con una foto de familia, un brindis o algo así, coral, como es esta telenovela.
Aunque no he visto ninguno de esos 'remakes',no he oído más que cosas buenas de todos ellos, así que ya me contarás.
Un saludo!