Todos hemos visto alguna escena de Rebelde.
Lo que Televisa consiguió con esta telenovela es digno de estudio ya que se
propusieron hacer un remake de una
telenovela argentina que acababa de emitirse con gran éxito y que había sido
vendida a infinidad de países. No parecía aconsejable versionar algo que ya
conocía todo el mundo, pero lo hicieron y consiguieron un éxito igual (o mayor)
que el de la original, a la que superaron en más de cien capítulos.
Rebelde tenía seis protagonistas de carne y
hueso y uno de ladrillo y cemento, el Elite Way School, ese exclusivo colegio-internado
privado en el que vivían los protagonistas y en el que pasaba de todo. Siempre
quise poner en el mapa de los lugares de telenovelas aquel centro, que se me
antojaba un lugar curioso, no sé, como una especie de hotel en medio de un
bosque, a juzgar por las transiciones que se veían en la telenovela, una de las
cuales abre esta entrada. No iba bien encaminado…
Bosque
Real es el nombre de este lugar, un proyecto faraónico que comenzó a desarrollarse
a finales de los 90 y que para los expertos es "el proyecto inmobiliario
más importante de México y América Latina". Ubicado en Huixquilucan, una
de las zonas más tranquilas y verdes del Estado de México, el Bosque Real se
comenzó a levantar en 1999 sobre 580 hectáreas de terreno. Allí fueron edificadas
viviendas, centros deportivos, la casa club, sede del ficticio Elite Way
School, y hasta dos campos de golf. Sin embargo, el proyecto se quedó estancado
en torno a 2003, con distintos problemas económicos derivados de precios por
las nubes y el poco interés que había despertado entre posibles compradores.
Con la crisis del 2008 se acabó yendo al garete y, como suele ocurrir en estos
casos, una empresa adquirió por un precio irrisorio todo lo construido y se
propuso darle el empujón necesario para hacer de Bosque Real lo que se quería
hacer diez años antes.
Desde
el 2009 a hoy, Bosque Real ha visto mejorados sus sistemas de tratamiento de
aguas residuales, abastecimiento de agua potable y las fuentes de energía
eléctrica. Se construyeron nuevas calles y avenidas y se están construyendo
tres torres de 30 pisos por planta, que albergan más de 300 viviendas. A las
viviendas se sumaron proyectos para oficinas, un centro comercial y hasta un
nuevo campus de la Universidad Panamericana, una universidad privada. Todo ello
para que vivan unas 13.000 personas, aunque, como imaginaréis, no ha de ser
precisamente barato. Os dejo un vídeo promocional que salió hace apenas unos
meses para captar nuevos habitantes:
Es
espectacular lo que han hecho y lo que quieren hacer. Desde un punto de vista
empresarial me parece arriesgadísimo, más tal y como están las cosas, con una
crisis encima y sin habernos recuperado plenamente de la del 2008. A título
personal, ¿viviría en un lugar así? No lo creo. Pienso que la tranquilidad y lo
bonito del sitio no compensan tener que conducir siempre que quieras comprar o
salir a dar una vuelta por la ciudad. Obviamente, el precio tampoco. Imagino
que estará enfocado a grandes fortunas que se puedan permitir los gastos
comunitarios que deben ser estratosféricos, ya que no debe ser fácil mantener ese
macroequipo de seguridad privada que tiene el complejo. Ahora bien, es
innegable que es un sitio precioso y llamativo, por lo bien que han integrado
construcciones y paisaje, lo que no siempre se consigue, y sino que se lo
pregunten a una conocida ciudad de vacaciones española.
Comentarios
Vaya con la ciudad de vacaciones, la de aquí te debes referir a : Marina d,or 'dígame'... un fiasco total fui una vez (lo tengo a 1 h o menos) y vaya...nada que ver con «Port Aventura» con sus hoteles, a ver si vienes que te gustará y te das la vuelta por Salou y Cambrils.
Bueno este año no, mejor otro, ya sabes restricciones y mascarillas!!
Saludos😃
Este año toca descansar en casa... Y supervisar una obra que va para largo, pero con poder dormir más o menos bien y desconectar un poco de las teleclases de los últimos meses me conformo. En Asturias tiramos 25 días sin casos positivos y ayer saltó el primero, de un ovetense que volvió a su tierra desde Barcelona, donde trabajaba. Ojalá no nos corten otra vez, de raíz, nuestra vida con un nuevo confinamiento.
Un saludo!