Lo que hace la cuarentena… Buscando cosas con las que entretenerme en mi visita semanal
al kiosco, volví a comprar la revista Telenovela.
Llevaba tres años sin hacerlo, desde enero
de 2017, y fue como reencontrarme con un viejo amigo, por el que inevitablemente
han pasado los años. En aquella ocasión compré este número, el 1407,
correspondiente a la semana del 23 al 29 de marzo.
¿Qué
trae la revista Telenovela hoy por
hoy?, os preguntaréis quienes no la compréis. Ahora mismo os lo digo, pero
antes, quiero empezar con un detalle que me ha hecho mucha gracia: el solo con el que anuncian los 1,80 euros
que cuesta una revista con poco más de cincuenta páginas, si usamos el truco
editorial de considerar página la portada, la contraportada y sus respectivos interiores.
Dado
que Blogger no admite tablas ni columnas y que publicar fotografías del
interior de la revista es un pelín ilegal, he optado por resumir en una tabla
de Word convertida en imagen el contenido de este número. La podéis ampliar
haciendo clic sobre ella:
No
voy a insistir en que a la revista le hacen falta contenidos: críticas, detrás
de cámaras, reportajes para explicar cuestiones técnicas, entrevistas con
productores, guionistas, directores de escena… Hacerla más a lo Fotogramas. Ya me lo habéis escuchado un
montón de veces y ellos también, pero no me han hecho caso alguno.
Por
esa razón, me voy a centrar en los contenidos actuales. La revista sigue siendo
la que era, aunque ha asumido bastante bien la llegada de ficciones turcas, con
resúmenes de siete de esas ficciones (Hayat
y Amar es primavera no, desconozco si es algo que afecta a este
número o es general), que se han sumado a las telenovelas españolas, cinco en
estos momentos, y a las hispanoamericanas, con dos de estreno que son de las
que se ocupa la revista, junto a María
Mercedes en el coleccionable y una última sección que yo no conocía y de la
que luego hablaré. El equilibrio entre los tres grupos está bastante bien logrado,
lo que hay que aplaudir, con un montón de resúmenes, entrevistas, coleccionables…
En fin, lo que siempre había sido la revista Telenovela, su esencia. En las entrevistas siguen comprando algunas
a Mezcalent, cosa que no acabo de entender, ya que tienen en nómina periodistas
como Pilar Manzanares y Vilma Degorgue, que en este número se apuntan dos
grandes entrevistas –a José Manuel Seda y a Canan Ergüder, respectivamente–.
Que en los tiempos que corren se compre a una agencia externa algo que podría
hacer personal propio me parece sorprendente, amén de que muy probablemente
encarezca el precio de la revista.
Han
prescindido de Los rostros de las
telenovelas, pero no del material que tenían de esta sección, reciclado de
una forma muy sofisticada en Las
telenovelas de…, ese nuevo apartado con el que se cierra la revista y que
en este número estaba dedicado a Adela Noriega.
Tal
y como está ahora mismo la revista, las pegas se encuentran en otros frentes.
Para empezar, en el truco de rellenar una revista llamada Telenovela con una macedonia de contenidos para sacar casi diez
páginas más y llegar a las cincuenta. Sobran la programación de las
generalistas, que hoy todo el mundo mira en la propia tele o en el móvil, igual
que sobran las páginas de belleza, de teletrabajo, de cocina y hasta el
horóscopo. A estas diez páginas se suman otras cinco o seis que sobran
totalmente, dedicadas a publicitar otras revistas del mismo grupo o los últimos
productos de una conocida empresa de televenta.
Lo
dicho, para mí, el precio no se ajusta a lo que cabe exigir a una revista que
cuesta 1,80 y trae poco más de cincuenta páginas. Los resúmenes tienen un pase,
aunque a estas alturas en internet uno pueda saber qué va a pasar en cualquier
telenovela y las entrevistas están muy bien, pero, insisto en la necesidad de
apostar por el personal de la casa. Lo mismo se podría decir de cara a nuevas
secciones originales, no reciclajes cutres como lo que están haciendo en Las telenovelas de… No estaría mal
tampoco que dejasen de engordarla a base de paja para ofrecer más contenidos
acordes con el título de la revista. La variedad solo le queda bien a Pronto, la única revista capaz de entrevistar
a Belén Esteban en una página y hablar de un gran descubrimiento contra el
cáncer en la siguiente, sin que, inexplicablemente, resulte raro.
Vuelvo
a Telenovela para acabar refiriéndome
a algo con lo que comencé este blog: las erratas tan divertidas que se les
colaban a los redactores de Telenovela.
En este número solo he conseguido encontrar una, con la que cierro esta entrada…
Que te perdone Dios… seas quien seas
que has escrito esto, lleno de errores que te corrijo desinteresadamente:
Comentarios
A mí me pasó algo parecido. Subieron el precio, ya no me aportaba tanto y la dejé. Imagino que el perfil del lector habitual de la revista será el del espectador que sigue viendo telenovelas en la tele y que, por edad o por otras circunstancias, no se maneja muy bien en internet y prefiere por ello seguir leyendo sus resúmenes y sus noticias en la revista.
Deberían abrirse a recaptarnos a nosotros, los que consumimos telenovelas por internet, ya que los tiempos, en ese sentido, han cambiado mucho. En el próximo número viene como un reportaje sobre las telenovelas disponibles en plataformas... Puede ser el camino.
Un saludo!