HABLEMOS DE SERIES (I): De "Matadero" a la T3 de "La casa de papel"

Como cada puente de la Constitución y la Inmaculada, dedico un par de entradas a hablar de series. Una es esta que habéis comenzado a leer y la otra saldrá publicada mañana. 

En este 2019 que estamos a punto de acabar se han producido en España 62 series, todo un récord al que han contribuido en gran medida las plataformas. Es curioso, porque ese boom ha hecho que hasta quienes no estamos suscritos a ninguna plataforma hayamos acabado viendo alguna serie producida por esas plataformas. 

Echando cuentas, este año he visto ocho series. Hoy os hablo de cuatro de ellas.

Matadero (Diagonal TV para Antena 3, 2018)

Matadero fue la primera serie que se estrenó este año. Pepe Viyuela, Lucía Quintana y Carmen Ruiz protagonizan lo que Antena 3 y la productora vendieron como un thriller ibérico.

¿Qué es Matadero? Algo muy arriesgado para una televisión como Antena 3. Una mezcla curiosa de comedia –con mucho humor entre negro, surrealista y alocado–, thriller, narcoserie e historia clásica. Todo ello con un trasfondo aún más curioso: el de la España cañí y rancia en la que viven, representada en Torrecillas, un pueblo ficticio de Castilla en el que no faltan caciques, amas de casa abnegadas, trapicheos y un cuartel de la Guardia Civil en el que los agentes se pasan el día de brazos cruzados.

¿De qué va Matadero? Esto ya es más difícil de resumir. En el matadero del pueblo se trafica con droga que llega a través de cerdos importados desde Portugal. La casualidad quiere que al pueblo lleguen dos secuaces del narcotraficante gallego que controla la zona y descubran ese otro trapicheo de droga. El dueño del matadero muere de una forma muy absurda y los narcotraficantes la emprenden entonces contra su viuda y el cuñado de esta y veterinario del matadero y padre de la única guardia civil con dos dedos de frente que hay en el pueblo.

La serie, que es de temporada única y tiene diez capítulos, se disfruta mucho. Tiene un ritmo genial y como os digo, mucho humor a lo bestia. A mí, que soy muy de ese tipo de humor, me ha gustado. Tengo que destacar, especialmente, el grandísimo trabajo de Pepe Viyuela y Lucía Quintana, a la que no conocía y de la que desde ya me declaro fan. Es una pena que no funcionase como se esperaba, porque la idea de sus creadores era hacer una continuación con otros personajes y en otro pueblo en el que siguiesen pasando cosas. No va a poder ser.

La caza. Monteperdido (DLO Producciones para TVE, 2018)

A la semana de acabar Matadero, La 1 de TVE estrenó esta serie, basada en la novela homónima de Agustín Martínez y protagonizada por Megan Montaner, Alain Hernández y Francis Lorenzo.

¿Qué es La caza. Monteperdido? Pues un thriller de los de toda la vida. Quizás por eso se convirtió en la serie revelación de la temporada.

¿De qué va? Dos niñas desaparecen en Monteperdido, un pueblo de Alto Pirineo de la provincia de Huesca. Cinco años después aparece una de las niñas y la Guardia Civil, con dos agentes desplazados desde Madrid a la cabeza, trata de reconstruir qué pasó y qué fue de esas niñas en los cinco años que estuvieron lejos de casa.

Si os gustan este tipo de series, con desapariciones, agentes y mucho misterio, La caza. Monteperdido, os gustará. A ello hay que sumar otros tres elementos que tiene esta serie y que la han llevado al éxito en público y crítica. Megan Montaner y su impresionante trabajo es uno de ellos. Mirad que Sara, su personaje, es un personaje complejísimo, pero qué bien lo lleva Megan. Pese a los años que lleva haciendo televisión, es la primera vez que la veo en una serie y me ha fascinado, así de claro. ¡Y qué química tiene con Alain Hernández! El segundo de esos elementos de los que os hablaba son las localizaciones en el Pirineo aragonés, que son preciosas. A mí que me encanta la montaña, he disfrutado muchísimo con los paisajes que ofrece la serie, que además tiene una realización fabulosa. El tercer y último de esos elementos es el ritmo tan genial que tiene esta serie, que hace que enganche, y mucho. 

La serie tiene ocho capítulos, pero gracias a su éxito habrá una segunda temporada que partirá de cero, pero que estará firmada por Agustín Martínez, autor de la novela en la que se basa esta primera temporada. Llevará por título La caza. Tramuntana, porque la acción se traslada a Mallorca, de nuevo con Megan Montaner y Alain Hernández a la cabeza.

La que se avecina (T11) –Capítulos 1 al 11– (Contubernio para Mediaset España, 2018)

Ver una serie de Mediaset España siguiendo su emisión en alguno de los canales del grupo es un auténtico suplicio. Estrenaron la T11 de La que se avecina a finales de abril y a los dos meses la detuvieron para lanzar Señoras del (H)AMPA. Quedaron cinco capítulos por emitir que vieron la luz hace nada, a mediados de noviembre. Y mientras se sigue grabando lo que será la T12, que a saber cuándo veremos.

Por lo visto de esta undécima temporada se puede decir que La que se avecina sigue siendo La que se avecina, un vodevil en el que todo es posible. Pensada para que el espectador se olvide de sus problemas por un rato, esta veterana serie sigue cumpliendo con creces con esa misión. De los once capítulos ya vistos me quedo con algunas tramas, como el romance juvenil de Maite (Eva Isanta) y un amigo de su hija, el giro que ha dado el personaje de Coque (Nacho Guerreros), y todo aquello por lo que ha pasado el pobre de Javi (Antonio Pagudo), que lleva en el paro desde el final de la temporada anterior. Aplaudo que, por fin, los guionistas hayan decidido separar a Enrique de Alba, una trama que no me gustaba nada, y que hayan hecho que Antonio ‘saliese’ de la historia por uno o dos capítulos, viéndose lo necesario que es que el Recio en la serie. De los nuevos, me encanta Agustín (Carlos Areces) y el juego que está dando. 

Lo dicho, programadores de Telecinco, si leéis estas líneas, a ver si os animáis a estrenarla en vez de tanto reality.

La casa de papel (T3) (Vancouver Media para Netflix, 2019)

Tras ver el año pasado las dos primeras temporadas, en junio me puse con esta tercera, producida ya para Netflix y no para Atresmedia, aunque, como curiosidad, Atresmedia controla una parte importante de las acciones de Vancouver, la productora. Al final, todo queda en casa.

Parecía complicado reabrir una serie que estaba cerrada, pero el equipo de guionistas que capitanea Alex Pina lo ha conseguido, aprovechando en buena medida el éxito de los atracadores tras lo sucedido en la Fábrica de Moneda y Timbre. El nuevo atraco, con el Banco de España como escenario, tiene alguna que otra reminiscencia del anterior, pero tanto el escenario como el transcurso de los acontecimientos y la llegada de nuevos personajes hacen que la temporada se disfrute tanto como las anteriores. Me quedo, sin duda alguna, con Álvaro Morte, Itziar Ituño y la nueva incorporación, Najwa Nimri, que están magníficos. Los atracadores no se quedan atrás y aunque se echa en falta a Pedro Alonso, Rodrigo de la Serna lo suple con creces. Se nota también el aumento de presupuesto, especialmente en localizaciones y efectos especiales, que si ya eran buenos en las primeras temporadas, en esta son espectaculares.

Ocho capítulos componen esta temporada, que se completará, argumentalmente hablando, con los ocho de la cuarta, que se estrenará el mes que viene. Ahí estaré para verla.

Mañana cierro estos especiales sobre series con otros cuatro títulos.