ESTÁN PASANDO COSAS: "La Doña"

¿Sección nueva? Ni sí, ni no. Quizás os recuerde al “Una de…” de hace unos meses, enfocado en errores gramaticales en los documentos, pero os garantizo que con esta sección quiero ir más allá: quiero mostrar cosas raras que se ven en las telenovelas. Ya sea en documentos, ordenadores, teléfonos, subtítulos… Y por supuesto, con un poco humor.

Comienzo con un monográfico, dedicado a cosas raras que he ido viendo en la primera mitad de “La doña”, que sigo al ritmo de Nova aunque la estoy viendo por internet. 
Os aviso, antes de dos cosas: esta entrada contiene ‘spoilers’ y todas las imágenes se hiperamplían haciendo clic en ellas. Os aconsejo hacerlo, para ver mejor ciertos detalles.

Como sabréis quienes estéis viendo o hayáis visto “La doña”, Altagracia (Aracely Arámbula) decide vengarse de un grupo de hombres que años atrás le fastidiaron la vida. El primero de ellos es el magnate naviero Miguel Preciado. Voy con el análisis de varios detalles raros referidos a su desaparición y a cómo nos la han mostrado en la telenovela.

I. La hoja de desaparecido

La Policía de Investigación elabora una hoja de desaparecido. Supongo que alguien en su empresa lo habrá reportado como tal. Al margen de lo de que naciese en 1979 (lo siento, pero no es creíble que Miguel Preciado tenga solo 36 años, porque sí, desapareció el 07/07/2015), llama la atención un detalle: “tiene un lunar tipo moretón en una pompi y otro lunar pequeño en la mejilla derecha color carne”. Teniendo en cuenta que Preciado no tenía familia y vivía solo, ¿quién pudo suministrar a la Policía el detalle del lunar en la pompi? Para quien no lo sepa, una pompi es una nalga en el lenguaje popular de México. Quienes tenemos lunares en zonas que habitualmente no se ven no solemos decirlo. 
Por otra parte, ¿cómo es un lunar “tipo moretón”? Y otra duda que me asalta, ¿un lunar “color carne”, es lo mismo que una verruga?

Más datos a tener en cuenta: desaparece en Santa Fe (Veracruz). Mide 1,80, pesa 87 kg, tiene el cabello “normal negro quebrado mediano” y los ojos “medianos ovalados café obscuro” (será por adjetivos, ¿eh?).

II. La primera noticia sobre Preciado

Regina, la hermana de Altagracia, lee diversas noticias sobre la desaparición de Preciado en internet. Una de ellas es esta, del 4 de julio. El titular ya apunta maneras: “¡Vaya escándalo en Veracruz!”. Un momento... ¿Qué alguien desaparezca es un escándalo?.

En un principio parece que en México hay periodistas a lo Aramís Fuster capaces de escribir el día 4 una noticia sobre una desaparición que pasa el día 7, pero no… La cosa va más allá: el artículo habla de cómo la Guardia Civil (en México en algunos estados se llama así a la Policía Local de aquí) pide colaboración ciudadana para encontrar a “Miguel, desaparecido el pasado 6 de abril”. Y lo hace con un tweet, según el artículo, que dice que Preciado “mide 1,75 metros y pesa 75 kilos. Tiene el pelo corto y los ojos castaños”. Ya le han quitado cinco centímetros y cinco kilos y sus ojos ya no son “café obscuro” (entiendo que negros), sino “castaños”.

Fijaos en el periódico digital: “Noticentro” ofrece noticias de España, América, Brasil y… ¡Cataluña! ¿Es un periódico independentista? Que cada cual saque sus conclusiones... 

III. La segunda noticia sobre Preciado

Regina sigue leyendo noticias en internet y recae en “TDN”, un diario digital en el que lee más o menos lo mismo que en el anterior, aunque llama la atención un detalle: la web señala que en A Coruña hay una temperatura de entre 19º y 15º.

Igual es normal en México navegar por periódicos digitales en los que sale el tiempo de todas las ciudades del mundo, A Coruña incluida.

IV. La tercera noticia sobre Preciado

Nos vamos a “El Informativo”, otro diario digital. Ojo, que este tiene miga. El subtitular apunta que “el empresario Miguel Preciado, dueño de una Naviera en Veracruz, sigue desaparecido. La policía pide la ayuda del público en la búsqueda de Preciado”.

El cuerpo de la noticia expone que “esta mañana a primera hora era localizado el hombre que desapareció en la noche de la semana pasada. Protección Civil acuerda que en el campo y en el monte siempre hay que tomar precauciones. Procurar no ir solo y llevar forma de poder comunicarse, como por ejemplo un teléfono móvil”.

¿Giro drástico de los acontecimientos, como apunta el titular? ¡No! Copia y pega de una noticia del diario "La Opinión de Murcia", sobre un anciano desaparecido y hallado muerto en Cartagena, en mayo de 2016.

V. La cuarta noticia sobre Preciado

Regina sigue leyendo y recala en “Prensa”, otro diario ‘online’. Aquí no copian ni pegan, ni nada. Mucho más fácil, se inventan a la torera el cuerpo de la noticia: “Este hombre […] trabajaba con la constructora Sandoval, quien su jefa Altagracia Sandoval dice no tener culpa. De igual manera, habrán investigaciones en la Constructora”. Igualmente, añaden que “su familia está preocupada por su paradero”.

Rellenar por rellenar: ni la constructora de Altagracia fue investigada, ni Altagracia fue interrogada, ni Preciado tenía familia. Imaginación no le falta a quien hace estos montajes de supuestos diarios digitales. 

VI. Alejandro Céspedes, el segundo desaparecido

En este caso es Daniel Llamas quien lee en su ordenador esta noticia, de “El Sonar”. Está bastante mejor elaborada que las anteriores, pero el titular mete la gamba de pleno: “Alejandro Céspedez” [sic]. ¡Es Céspedes, caramba!

Es una pena que sobre Céspedes solo hayan sacado esta noticia en pantalla, porque viendo todo el material que ha dado Preciado, seguro que Céspedes habría dado tanto o más que él.

Si la segunda mitad es tan prolífica como esta primera (de momento, una cosilla ya tengo por ahí), habrá una segunda entrega dedicada a estos pequeños detalles. Si no, no pasa nada: tengo material para aburrir de otras telenovelas. 
Espero, por eso mismo, que os haya gustado esta entrega y que sirva, si llegase a ser leída por gente de la parte técnica de las telenovelas, para hacer que estos detalles se cuiden un poco más. Ahora, con la alta definición, se ve hasta los poros de la piel con solo detener la reproducción del capítulo.