CRÍTICA: "El Señor de los Cielos" (T5) (Telemundo y Argos, 2017)

En el 2014 vi las dos primeras temporadas. En 2015, la tercera y en 2016, la cuarta. Tras la decepción que para mí supuso esa cuarta temporada fui dejando la historia y cuando quise ponerme con la quinta era ya enero de 2018. La terminé casi tres meses después. Esta es su correspondiente crítica.

[¡OJO! Si estás viendo esta telenovela o tienes pensado hacerlo, quizás no deberías leer esta crítica. Contiene ‘spoilers’ que hacen aconsejable su lectura después de haberla visto].

SINOPSIS
Totalmente recuperado de su trasplante de riñón, Aurelio Casillas (Rafael Amaya) disfruta de la vida en uno de sus ranchos mientras planea su retirada del negocio. Comprometido con Emiliana (Vanessa Villela), vive un dulce momento solo enturbiado por la situación de Mónica (Fernanda Castillo), en coma desde hace meses, tras recibir un disparo el día de su boda con Víctor (Jorge Luis Moreno). Pese al tira y afloja que siempre han tenido, Aurelio ha decidido cuidarla y correr con los gastos médicos que tenerla en su rancho comporta.
*Logotipo de la quinta temporada
Lejos de allí, Víctor inicia junto a los paramilitares y los ‘maras’ que lo apoyan una campaña de violencia con la que busca sembrar el pánico en el país y desestabilizar a Aurelio. Su propio sobrino se convertirá en un gran problema para el poderoso ‘Señor de los Cielos’. No será el único. Aurelio tendrá que luchar contra Tony Pastrana (Emmanuel Esparza), uno de los grandes distribuidores de droga de Estados Unidos, que es puesto en libertad tras pasar diez años en prisión por culpa de Aurelio, del que desea vengarse. También tendrá que hacer frente a los problemas de liquidez que le traerá el hecho de que su examante y gestora económica Esperanza (Sabrina Seara) entregue todo su dinero a la DEA.
Pese a que sus enemigos le traerán bastantes quebraderos de cabeza, Aurelio también tendrá diversos apoyos en el mundo del narcotráfico. Es el caso de Eunice, ‘La Felina’ (Marisela González) y de su amiga Pilar (Patricia Vico), que se convertirá en una de las mujeres más importantes de la vida del narcotraficante.

DATOS y TRÁILER

95 capítulos. México (Telemundo y Argos), 2017. Productor ejecutivo: José Gerardo Guillén.

PERSONAJES y ACTUACIONES
Esta es una temporada mucho más pensada, a nivel de personajes, de tramas y de todo que las dos anteriores, y en especial, la cuarta. O al menos esa es la impresión que como espectador tuve.
*Rafael Amaya y Fernanda Castillo vuelven a ser Aurelio y Mónica
Ello provoca que los personajes se encuentren mucho mejor definidos que en las dos temporadas anteriores. Quiero pensar que se deba a las críticas que muchos hicimos al respecto.
Rafael Amaya repite como Aurelio Casillas. Un Aurelio que ha vuelto a ser el que era tras superar sus problemas renales. Rafael ha vuelto a disfrutar en grande y se lo ve muy entregado, más que en la cuarta temporada, aunque se le nota que disfruta especialmente en las de acción. Pese a que Aurelio ha vuelto a ser el que era y a estar de nuevo guiado por la violencia, la venganza y la lucha contra sus enemigos, también ha demostrado tener un corazón que hace mucho que no se le veía -puede que desde la primera temporada-. Sí. Aurelio Casillas llora y se viene abajo ante una situación que dejaría tocado al más duro. Uno de esos matices enriquecedores de los que os hablaba hace unas líneas y que en este caso le viene muy bien al personaje, gracias a que Rafael sabe manejarlo como nadie.
Fernanda Castillo le acompaña una vez más como Mónica Robles. Fernanda es una enorme actriz y de nuevo hace un grandísimo trabajo con este personaje que, un poco como Aurelio, vuelve a ser el que era, tras un camino argumental junto a Víctor que poco le favoreció. Al igual que Aurelio, a Mónica también le han introducido una serie de matices que han hecho más rico el personaje. En esta temporada Mónica ha seguido siendo una cabrona, pero también se ha visto a la Mónica madre y a la Mónica enamorada que por fin reconoce que pese a sus idas y venidas, Aurelio es el amor de su vida. ¡Qué gran pareja hacen Fernanda y Rafael! ¡Qué química tienen!
*Emmanuel Esparza interpreta a Tony Pastrana
La quinta temporada cuenta también con un villano de excepción: Emmnuel Esparza. El español interpreta a Tony Pastrana, un hombre que quiere a toda costa acabar con Aurelio, que lo traicionó diez años antes, delatándolo y provocando que acabase en prisión. Es un personaje creado de cero -pese a tener ese pasado con Aurelio, no aparece en ninguna temporada anterior. que aunque al principio recuerda por sus intenciones a ‘El Feyo’, poco a poco va configurándose de una manera muy interesante. Es un tipo loco, muy cínico y con un toque irónico que pese a ello cae bien. Emmanuel ha hecho un magnífico trabajo, llevando al personaje de una forma muy natural, pese a que en ciertos aspectos se prestaba a la sobreactuación e incluso a caer en la caricatura. Ha sido un villano en mayúsculas y ha tenido un muy buen ‘feeling’ con Fernanda, con la que comparte muchas tramas. Ojalá vuelvan a trabajar juntos.
Sabrina Seara continúa una temporada más como Esperanza. Una Esperanza diferente que se ha mostrado mucho más humana que en temporadas anteriores, y eso que este era uno de los personajes menos planos de la historia. Pese a pasarse los capítulos huyendo de Aurelio, el espectador ha podido ver una Esperanza noble, enamoradiza, que es a estas alturas todo un icono de la comunidad LGTB en el género. Sabrina se ha lucido una vez más.
Otra que también repite es Carmen Aub. El paso del tiempo ha hecho mella en Rutila, uno de los personajes con más evolución dentro de la historia. Ya no es la joven alocada, ahora es toda una mujer que vive alejada del narcotráfico gracias a su empresa de moda. Una mujer que quiere enamorarse para obtener la calma definitiva que le pide su espíritu y que en ese sentido, no tiene mucha suerte. Es la temporada que más me ha gustado Rutila, las cosas como son, gracias al buen trabajo de Carmen.
*Rafael Novoa es 'El Duro' y Marisela González, 'La Felina'
Una evolución muy interesante es también la que en esta temporada ha experimentado un personaje que a mí no acababa de convencerme: Eunice Lara, ‘La Felina’, interpretada por Marisela González. He disfrutado mucho con ‘La Felina’, porque se ha hecho una profundización muy interesante en el personaje, que era muy plano. El espectador ha visto a una Eunice madre, amiga y mujer, que sufre y disfruta de la vida a partes iguales. Esos matices que le han dado a ‘La Felina’ han hecho que Marisela se haya lucido mucho más esta temporada que en las dos anteriores. A la profundización de ‘La Felina’ ha contribuido también Reinaldo, ‘El Duro’, su otrora marido, al que da vida Rafael Novoa. Para mí, Novoa es uno de los mejores actores de Colombia y aquí ha cambiado de registro, con un personaje cargado de claroscuros que no se llega a conocer de verdad hasta el final. Mi enhorabuena a Rafael. Además, Marisela y él han hecho una pareja muy interesante. Un apunte curioso sobre él: pese a estar durante toda la temporada, su nombre no aparece en los créditos de la entrada. Junto a ‘La Felina’ y ‘El Duro’ ha estado la actriz española Patricia Vico, que ha interpretado a Pilar, un personaje muy complicado que ha sacado adelante sin problemas y con el que el espectador empatiza mucho. Ha tenido, además, una química muy bonita con Rafael Amaya, con el que tiene escenas muy bonitas.
Entre los aliados de Aurelio se encuentra también Mabel Castaño (Mariana Seoane). A Mariana le falta soltura y sobre el personaje, ya os comentaré más en el siguiente apartado.
*Manuel Balbi ha repetido como Rodrigo Rivero-Lanz
Como suele ser habitual en Aurelio, los enemigos tampoco le han faltado. Tony encabeza una larga lista de personas que quieren dar con él. Otros muchos lo buscan para enviarlo a prisión y desvelar su relación con el presidente. Entre ellos están, desde México, Rodrigo Rivero y Evelyn García, nuevamente interpretados por Manuel Balbi y Lorena del Castillo, que hacen un trabajo espléndido y tienen un ‘feeling’ brutal. Ojalá vuelvan a coincidir en otra historia. También desde México operan el comandante Bernardo Castillo y la periodista Carla Uzcátegui. José Sedek y Elsy Reyes se encargan de dar vida a estos dos nuevos personajes que han dado mucho juego y que prometen seguir dándolo en la próxima temporada. Buen trabajo el de ambos.
Desde Estados Unidos trabajan con el mismo cometido el exembajador de Venezuela Jorge Elías Salazar (Iván Tamayo) y Guillermo Colón (Daniel Martínez). Iván repite. Si me gustó en la temporada pasada, en esta me encantó. Creo que el giro que le han dado al personaje, como agente de la DEA, le ha beneficiado mucho, sin olvidar su relación con Esperanza, con tanto tira y afloja. Daniel ha sido una de las incorporaciones de esta temporada, para mí todo un acierto porque es un personaje con el que se simpatiza, con una historia personal dura que seguramente le hará involucrarse todavía más en su lucha contra Aurelio en la siguiente temporada.
Fuera de los cuerpos policiales, a Aurelio lo buscan los Salvatierra, los padres de Esperanza. Carlos Mata y Catherina Cardozo dan vida a Juan Carlos y ‘Pina’, un matrimonio que vive una interesante evolución a lo largo de la temporada. Es un placer ver de nuevo a Carlos Mata en acción y su compañera ha sido todo un descubrimiento. En una entrevista ambos deseaban más trabajo en México, dada la crisis por la que el sector pasa en Venezuela: ojalá les lleguen oportunidades, porque las merecen.
*Lisa Owen ha vuelto a ser doña Alba Casillas
El elenco de esta quinta temporada es muy extenso y referirme a todos sus integrantes implicaría hacer de esta crítica algo interminable. Voy acabando este apartado con dos menciones positivas: una, a Lisa Owen, que vuelve a dar vida a doña Alba Casillas, la madre de Aurelio, un personajazo que muchos extrañamos durante la cuarta temporada. Me encanta doña Alba y me encanta cómo la lleva Lisa, una grandísima actriz. La otra, a Jorge Luis Moreno, que repite como Víctor Casillas, sobrino y enemigo de Aurelio. A diferencia de las dos temporadas anteriores, en esta Jorge Luis supo convencerme, en parte también por la profundización que los guionistas hicieron de su personaje, mostrando su lado más vulnerable y haciendo que el espectador y hasta él mismo lo comprendiesen mejor.
Concluyo, definitivamente, con un positivo para Lilo Durazo (que interpreta a ‘La Niña’) y David Ponce (‘Skinny’), dos descubrimientos; Juan Martín Jaúregui (Sebastián), Ernesto Benjumea (‘Penumbra'), Alejandro López (que una temporada más ha sido ‘El Super Javi’), Kriss Cifuentes (Sutamarchán, el brazo derecho de ‘La Felina’) y José Juan Meraz (Ramón, el hombre de confianza y ‘Pepito Grillo’ de Mónica Robles). 
[PERSONAJES Y ACTUACIONES: 2,7/3]


TRAMAS
Esa impresión de que los responsables de la historia se reunieron, leyeron críticas y tomaron decisiones de cara a plantearse cómo desarrollar la temporada no solo se ve a nivel de personajes. También en lo que a tramas se refiere. Puede parecer una tontería, pero tanto la tercera como la cuarta parecían escritas sobre la marcha, sin un rumbo fijo, saliese lo que saliese, algo que muchos criticamos.
*Aurelio, atacando a sus enemigos
Ese diseño previo de la temporada ha hecho que esto vuelva a ser “Las aventuras y desventuras de Aurelio Casillas” y no “Aventuras de varios y Aurelio por ahí”, que era en lo que se había convertido. Aurelio ha vuelto a ser el que era, traficando, dando guerra e inmiscuido en una serie de tramas muy ligadas a la actualidad, otro valor de la telenovela que se había perdido en las dos últimas temporadas. Por boca de Aurelio salen duras críticas a Nicolás Maduro y la situación que vive Venezuela y también a Raúl Castro y el régimen comunista cubano, poniendo de relieve los vínculos que ambos gobiernos tienen o podrían tener con el narcotráfico. También ataca duramente a Trump, “el payaso que gobierna Estados Unidos”.
Esta quinta temporada es muy crítica, no solo a través de las tramas de Aurelio. Tony Pastrana ataca varias veces al yihadismo (con el interesante mensaje de su amigo Alí como contrarréplica); ‘La Felina’ no duda en decir lo que muchos pensamos de la monarquía española y Esperanza habla con claridad de los papeles de Panamá.
La quinta temporada tiene un tejido argumental muy potente, con el renacimiento del protagonista y la cacería que emprende para vengarse de aquellos que lo han traicionado como base. De ese planteamiento general surgen tramas propias de cualquier narconovela (alianzas, traiciones, trapicheos…). También tramas policíacas (con Jorge Elías, Colón, Rivero o García), las propiamente ‘de cacería’ (como la que emprende Aurelio hacia Esperanza o la que mantienen durante toda la temporada Aurelio y Tony) y tramas más románticas (entre las que destacan las historias de Aurelio y Pilar o la particular relación entre Tony y Mónica). Todo ello muy bien encajado y planeado y con Aurelio como eje, lo que no ocurrió en las temporadas anteriores.
*Tony y Mónica, a su llegada a Colombia en uno de sus viajes
Del conjunto de tramas, yo me quedo, sin duda alguna, con las alianzas y su continua guerra. Hablo, en un bando, de Aurelio, ‘La Felina’ y ‘El Duro’ y, en el otro, de Mónica y Tony. Ha sido interesante también, dentro de esa guerra entre alianzas, ver el papel que ha jugado la tecnología por parte de Aurelio (con drones, un ‘hacker’ profesional, control de cámaras de videovigilancia…). Es poco frecuente que una historia de este tipo se juegue tanto y tan bien con lo que pueden aportar las nuevas tecnologías.
La cacería de Aurelio hacia Esperanza es también otra trama interesante, en la que como en la anterior la tecnología está muy presente.
En general el ritmo de esta temporada es infinitamente mejor que el de las dos que la preceden y casi al nivel de la primera y la segunda. Todo ocurre muy rápido y es imposible no aburrirse con tanta acción, alianzas, traiciones y viajes. Sí. Ese es otro valor de la quinta temporada: es una temporada ‘viajera’, con tramas que se ambientan no solo en México, Estados Unidos y Colombia, sino también en España, Francia, Cuba u Honduras, por citar algunos ejemplos. Aunque no sean localizaciones reales y casi no se salga de México, el hecho de que los personajes y sus historias se ‘trasladen’ a otros países hace que sea más agradable ver aquello que se nos cuenta y que tramas que podrían seguir los esquemas de México se enriquezcan con elementos de otros países (la Guardia Civil, en el caso de España o la Gendarmería francesa, por poner dos ejemplos policíacos).
Los acontecimientos siguen su curso hasta llegar a un final potente, casi apoteósico, en el que se atan algunos cabos, otros quedan totalmente desatados y otros se dejan un poco a la imaginación del espectador a la espera de ver qué pueda ocurrir en la sexta (y por ahora última) temporada de la historia.
*Mabel y su hijo conversan en una escena
Pese a la planificación que se ve que hay tras esta quinta temporada, existen en ella algunos errores en el desarrollo de las tramas. El principal, derivado de rescatar a dos personajes de otras historias. Podría entender que recuperasen a Mabel Castaño (Mariana Seoane), uno de los personajes principales de “El Chema” (Telemundo y Argos, 2016-2017) para cerrar su arco argumental, inconcluso en el ‘spin off’. Sin embargo, no entiendo que le hayan dado un peso argumental que no merece, convirtiéndola en una villana que trastoca la historia de una forma totalmente innecesaria. Podría haber estado bien un cierre de la trama del personaje, pero limitado a dos o tres capítulos. No entiendo tampoco que rescatasen a Leandro Quezada, el personaje de Miguel Varoni en “Dueños del paraíso” (Telemundo y TVN, 2015). Si necesitaban un nuevo narco colombiano, que lo hubiesen construido desde cero. A él y a sus tramas. Afortunadamente para los que no vimos “Dueños del paraíso”, Leandro no recuerda ni menciona nada de su vida anterior, algo que sí hace Mabel y que en este caso se cubre con ‘flashbacks’ de “El Chema”.
Hay también fallos menores, como señalar en varias ocasiones que Leonardo, el hijo de Mabel y ‘El Chema’, tiene dieciocho años. Es imposible: Mabel lo tuvo que haber parido, siguiendo la cronología de “El Chema” en torno a 1990-1991 y la quinta temporada de “El Señor de los Cielos” transcurre en 2017. Tendría, como mínimo, unos veintiséis años. Otro fallo: en uno de sus encuentros Sebastián llama por su nombre, Rutila, a la que para él debía ser Ruth (aunque conociese el verdadero nombre de su novia, no debía decirlo, para no delatarse como infiltrado). Tampoco se entiende que con lo que viajan Aurelio e Ismael por Europa no se lleguen a Suiza, a ver a Luzma, ellos que vuelan en avión privado, aunque Ismael se lo sugiera a su padre en una ocasión. Cierto es que Gala Montes, la actriz que daba vida a la hija menor de Aurelio, anda en otros proyectos, pero hubiese estado bien que aunque fuese en un capítulo, se nos contase cómo lleva la vida Luzma en Suiza.
Un poco mayor que los anteriores fallos es el último que quiero contaros: la ‘Tata’ Guerra enferma y le diagnostican esclerosis múltiple. Termina la temporada saliendo totalmente curada de una caseta en medio del bosque gracias a la buena mano de una sanadora y a sus terapias a medio camino entre la medicina natural y la brujería. Igual soy yo que no creo mucho en la praxis de curanderos, sanadores y personajes similares, pero tanto para la ‘Tata’ como para la historia y, especialmente, para dar visibilidad a este padecimiento incurable, hubiese estado mejor que la mujer de Dalvio tuviese que seguir lidiando con su esclerosis múltiple.

[TRAMAS: 4/5]

MÁS COSAS
En la crítica de la cuarta temporada os hablaba de cómo Aurelio se había mudado a la ciudad, dejando atrás el campo, la provincia, clave en las tres primeras temporadas y haciendo que la historia perdiese un poco su esencia. También en eso parece que se han detenido los responsables de la telenovela a la hora de planificar esta nueva tanda de capítulos: Aurelio ha vuelto a su hábitat natural, a sus ranchos y con su flota de aviones y el dineral que ha invertido en tecnología controla el negocio desde la tranquilidad de la provincia.
*El coche del presidente Terán explota por orden de Víctor
No tengo queja alguna de las localizaciones y exteriores, más allá de esos errores garrafales tratando de hacer pasar a otras ciudades españolas por Madrid, de los que os hablé hace unos días.
El salto, en todos los aspectos, que marca la quinta temporada con respecto a las dos anteriores se nota también a nivel de efectos especiales, mucho mejor realizados y en particular las explosiones.
La musicalización está bien, pero después de cinco años escuchando los mismos ‘soundtracks’, comprenderéis que no estaría mal renovar un poco el repertorio, como se hace, cada temporada, con el tema de la cabecera, que en esta ocasión lleva por título “El quinto corrido” y al que don Chayo, de Los Cardenales de Nuevo León, le pone voz. Por cierto, la entrada es la más bonita de las que cinco que lleva la telenovela, con un grafismo  y unos efectos sobre las imágenes que quedan muy bien:

Sobre el grafismo de la historia, un pequeño detalle. Es la primera telenovela que veo en la que los rótulos para situar la acción en un determinado lugar aparecen en la parte superior de la imagen, centrados, y no en la parte inferior, que es lo habitual. Al principio me chocó un poco, pero al final es una novedad que acabó por gustarme:

Poco tengo que comentar sobre el vestuario, más allá de una novedad: Aurelio Casillas se viste de Rafael Amaya Western Style, la marca de ropa diseñada por Rafael Amaya inspirada en el propio Aurelio Casillas y ese toque norteño que tiene el personaje. Trabalenguas aparte, es una línea de ropa que no es mi estilo, pero aún así reconozco que tiene alguna camisa que yo me pondría, y eso que no soy muy de camisas.
Podría repetir por enésima vez lo que pienso de la censura de las palabras malsonantes, pero creo que ya lo sabéis y que es infructuoso recalcarlo, viendo que aquí vuelve a pasar. 
[PERSONAJES Y ACTUACIONES: 1,8/2]

*Parte del elenco y del equipo técnico en la presentación a los medios
Esta quinta temporada ha sido, en resumen, la temporada del renacer de la historia de Aurelio Casillas y los suyos. Una historia que había perdido el norte y se ha más o menos reencauzado gracias a un buen trabajo en el campo de los guiones, tanto en lo que a tramas como a la profundización de los perfiles de los personajes se refiere. Toda una sorpresa, teniendo en cuenta que comencé a verla sin la más mínima expectativa, reforzada en un elenco sólido en el que Rafael Amaya, Fernanda Castillo y Sabrina Seara han vuelto a brillar y que incorporó, con acierto, caras nuevas como Emmanuel Esparza o Rafael Novoa.
-PUNTUACIÓN FINAL: 8,5-

Comentarios

ramona ha dicho que…
Me esperaba que dijeras algo del final .. de la muerte más polémica (aunque se entiende ) y el final tan mal echo de un personaje tan importante como el que fue M
GAFEMO ha dicho que…
Hola, Ramona.

No lo he comentado, porque me parecía un 'spoiler' (¡CUIDADO TODOS LOS QUE LEÁIS ESTO!) demasiado gordo y porque tengo una tesis que estoy deseando compartir.
La muerte de ese personaje es muy cutre, te doy la razón. Pero lo es porque:
-O bien quisieron cubrir las espaldas de la actriz (por si no saliese adelante esa otra telenovela que está haciendo).
-O bien ese personaje no ha muerto. Solo recibe una bala en una zona que no es precisamente mortal. Aurelio cuenta después que de ella, de su hombre de confianza y de otro personaje muy gatuno no se supo nada. Y ese personaje gatuno, por lo que parece, va a estar en la sexta temporada, pese a haber recibido unos cuantos tiros más que M. No es la primera vez que 'matan' o desaparecen a algún personaje importante para crear ruido y polémica (y publicidad) y luego lo recuperan aunque sea para cerrar la serie que es lo que parece que hará la sexta temporada.
Es solo una teoría, también te digo.

Un saludo!
Andrea ha dicho que…
A mí también me gustó en general la temporada. Pero me decepcionó muchísimo la muerte de M (era mi personaje favorito) ya que pareció la muerte de un matón cualquiera en vez de alguien tan importante.
Imagino que fue por lo que tú dices Gafemo, pero quedó muy cutre.
No creo que vea la siguiente temporada, ya sin M la novela pierde muchísimo y prefiero dedicar ese tiempo a ver otras novelas.

ramona ha dicho que…
Hola Gafemo ahora te entiendo, pero aún así no creo que ella vuelva y más después del proyecto que está haciendo creo que le está yendo bastante bien ...ya veremos a ver si dan alguna explicación en la 6 temp sobre esto
GAFEMO ha dicho que…
Buenas noches:

Estoy con vosotras en lo cutre que fue esa muerte. Como vosotras, confío en que expliquen o desarrollen algo sobre eso en la sexta temporada, ya que la explicación (por decir algo) que da Aurelio en el epílogo final es muy pero que muy pobre. No aporta nada a lo poco que ha visto el espectador.
A ver qué pasa. Por cierto, por lo que parece la sexta llega ya, en mayo.

Un saludo!
MytecDU ha dicho que…
Esta serie ya ralló en lo ridículo. En todos los enfrentamientos caen solamente los pendejos, y al Aurelio no lo toca ni un mosquito. Caramba, pudieran ponerle una pizca de realidad. Nuevo nombre: The Heaven Lord - Hard die. No me jodas!