El 1 de septiembre de 2022 os daba la bienvenida al noveno curso de este blog. Parece que fue ayer aquel "bienvenidos de nueve" con el que abrí la temporada, pero ha pasado casi un año.
Es alucinante lo rápido que se me está pasando el tiempo conforme me hago mayor. Va a ser que no, que el tiempo no se detiene ni cuando uno se enamora ni cuando uno bloguea ni cuando nada. He llegado a la conclusión de que vivimos tan deprisa que muchas veces no acertamos a discernir si vivimos a tiempo o a destiempo.
En estos últimos once meses han pasado muchas cosas, muchísimas. A título personal, descubrí que es tan posible como necesario borrar los pecados ajenos de tu vida. Solo así se puede avanzar y sorprenderse con cómo muchas veces la propia vida elige por ti y para ti. No es un camino fácil, pues a veces toca vencer alguna ausencia, para reafirmarnos en que la vida es lo más maravilloso que existe… bueno, la vida y el viento del otoño, mi estación favorita. Estamos aquí, señores y señoras del mundo. Aprovechémoslo para sentirnos invencibles, para disfrutar y sentir el aquí y ahora. Carpe diem, amigos.
Toca parar unas semanas, hasta el 6 de septiembre. Lo necesito yo, lo necesita el formato y lo necesitáis vosotros y vosotras. Entre mis tareas para estas vacaciones están contestar un montón de cosas que tengo pendientes de responder; recuperar el Whatsapp para el blog y ponerme ya con el concurso de críticas, que comenzará en dos meses escasos. Habrá tiempo también para ir cocinando algunas novedades, entre ellas una sobre la que he estado trabajando en mi poquísimo tiempo libre: un podcast o similar para hablar de telenovelas a viva voz.
Voy a por la décima temporada en un gran momento para el blog. No suelo prestar mucha atención a las estadísticas, pero en junio se contabilizaron casi 112.000 visitas y este julio la cosa va por el mismo camino. Es impresionante y eso que para mí no han sido los mejores meses en cuanto a contenidos.
Disfrutad de lo que queda de verano. Yo voy a aprender a nadar o a intentarlo. Sí, no sé nadar 😅. También quiero disfrutar de largos paseos a dos ruedas, leer y escribir. Todo ello para intentar detener el tiempo, o, al menos, sentir que pasa más lento.
Nos leemos en septiembre.
¡Sed felices!
G.
Comentarios
Me sorprende lo de nadar pero bueno, al menos intenta aprender lo básico que es algo importante por si acaso.
En cuanto al tiempo, a mi estos años de la pandemia se me han pasado como si fuera 1 mes. Me he quedado un poco estancada a nivel personal y espero poder retomar el ritmo cuanto antes.