El 12 de junio, hace justo un mes, Televisa estrenó su nueva apuesta estelar, Tierra de esperanza. Una década después de La Tempestad, la productora mexicana apuesta otra vez por La Tormenta como base de un remake que, eso sí, pretende ser más fiel que el que ya tuvo esta historia original de Humberto, Kiko, Olivieri.
En esta entrada os cuento qué me ha parecido su primer capítulo.
Antes de entrar en materia, debo aclarar que no vi La Tormenta. Aun así, conozco algunos elementos de la historia, nombres de personajes, localizaciones… Quizás por eso, a primera vista esta telenovela recuerda, y mucho, a aquella. Como en la original, aquí hay un Santos y una María Teresa. También una hacienda localizada en Puerto Bravo, en medio de un paraje tan espectacular como salvaje.
La historia arranca con la detención de Esteban Arteaga (Alejandro Tommasi), un rico empresario acusado de fraude. En las manos de su hija María Teresa (Carolina Miranda) queda la posible libertad del empresario, para lo que se ve obligada a desplazarse hasta Puerto Bravo, una localidad de provincia donde su padre conserva una hacienda. Por allí anda Santos (Andrés Palacios), un capataz que desata pasiones entre las mujeres del pueblo y con el que se verá obligada a llevarse bien, pese a que su primer encuentro es bastante frío.
Un amplio abanico de personajes secundarios arropa a los protagonistas. Ahí están Valentina (Sofía Castro), una joven obsesionada con Santos, hija de Bernarda (Mariana Seoane), una mujer de armas tomar, literalmente. Bernarda es también la madre de Regina (Clarisa González), una joven sordomuda, que, si no me equivoco, en la original su equivalente era ciega. También están por ahí Adriana (Martha Julia), una mujer que ha sembrado odio contra Santos y que aspira a que Marco (Luis Roberto Guzmán) acabe con él. Marco se erige como el posible gran villano de la historia, si bien echo en falta un personaje que en la original fue clave y que, por lo que he leído, aquí no se ha contemplado: Isabella, la prima de la protagonista, una mujer que era toda bondad, nótese la ironía. No entiendo por qué prescindieron de semejante villana.
El primer capítulo dura algo más de cincuenta minutos. Tiene buen ritmo y combina de forma equilibrada la presentación de los personajes y la entrada de la acción. En líneas generales el trabajo del elenco es bueno. Carolina Miranda se luce y demuestra por qué es una de las grandes nuevas protagonistas. Sofía Castro tampoco se queda atrás. Andrés Palacios demuestra lo camaleónico que es, ya que tan pronto interpreta al presidente de México como a un inmigrante o a un capataz.
La realización es estupenda. Produce José Alberto Castro y está todo más que cuidado. Las localizaciones del Puerto Bravo ficticio son una preciosidad y no se diga nada de los escenarios de esa Ciudad Capital que, en realidad, es el DF. La musicalización es estupenda y se observa desde la propia entrada, con este tema de La esperanza, de Isidro Chávez, aka Espinosa Paz:
Un mes después de su estreno, Tierra de esperanza mantiene unos datos correctos en México, aunque inferiores a los que cosechó El amor invencible, su predecesora.
¿Qué os está pareciendo a aquellos que la estéis llevando al día o hayáis visto más que su primer capítulo?
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