La de hoy más que una cara oculta del género es una cara oculta de las
productoras que hacen posible las telenovelas. Supongo que muchos sabréis que
en España determinadas empresas (hidroeléctricas, carburos…) están obligadas
por ley a invertir parte de sus beneficios en proyectos sociales. Algo así
hacen, aunque no sé si obligadas por ley o de corazón, algunas de las
principales productoras de telenovelas: Televisa, Azteca y Telemundo.
Televisa
lo hace con una fundación propia que trabaja en la búsqueda de oportunidades para
niños, jóvenes y adultos que se hallan en lo que se conoce como situación de
exclusión social. En 2018 dieron más de 37.000 becas, formaron a unos 119.000
emprendedores y ayudaron económicamente a casi 190.000 afectados por el terremoto
de septiembre de 2017. Además de estas ayudas directas, la Fundación Televisa
organiza distintas campañas de concienciación sobre aspectos relacionados con
el cuidado del medioambiente, los buenos
hábitos alimenticios o el uso de las nuevas tecnologías, entre otros temas.
Todo ello, para mejorar la vida de los mexicanos, como se insiste en varias
ocasiones en la web de la
fundación.
En
México también opera la Fundación
Azteca, del Grupo Salinas. Esta fundación desarrolla distintos proyectos
educativos, como el Plantel Azteca, con el que forma adolescentes en su propia
red de centros. En ellos se imparte secundaria y preparatoria y buscan captar y
formar a los mejores estudiantes –exigen un 9 de nota media en primaria–. Todos
ellos estudian becados. Los niños fueron también los protagonistas de otra de sus campañas más conocidas, Rompiendo el silencio, con la que 300 niños recuperaron el sentido del oído gracias a implantes cocleares, audífonos y tratamientos que escapaban de las posibilidades económicas de sus familias.
La
Fundación Azteca también organiza juguetones,
o campañas de donaciones de juguetes para los niños más desfavorecidos, y
aprovecha los canales del grupo para lanzar distintos mensajes sobre el cuidado
del medioambiente o los efectos nefastos que tiene el consumo de drogas.
Telemundo
también cuenta con una fundación a través de NBC Universal, el grupo
audiovisual al que pertenece. La Fundación NBC Universal y Telemundo opera en Estados
Unidos, apoyando económicamente a distintas organizaciones sin ánimo de lucro para
que desarrollan distintas labores. Esas organizaciones son seleccionadas a
partir de concursos como el Project Innovation, por el que se otorgaron 50.000
dólares a cinco organizaciones de Chicago.
No
sé a vosotros, pero a mí, como seguidor del género y consumidor de algunas de
las producciones de estas tres empresas, me agrada ver que tienen un compromiso
con la sociedad que va más allá de entretener con sus programas, telenovelas y
series. Que algo del mucho, muchísimo, dinero que ganan sirva para becar niños y
adolescentes o contribuir a proyectos que mejoren la calidad de vida de la
gente es algo bonito.
El
mundo sería mejor si todas las empresas con poderío económico ayudasen a quienes
menos tienen.
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