-Esta entrada forma parte de las cuatro entradas especiales que bajo el título
Hablemos de tele he preparado para los miércoles del mes de agosto-
Tengo
un problema con las series: me cuesta verlas si no es por la televisión. A su
vez, esta circunstancia comporta para mí otro problema: las series se emiten en
España, como muy pronto, a las once de la noche, lo que implica que acaben
pasadas las doce. Es una malísima hora para los que nos levantamos a las siete
de la mañana. Por todas estas razones, lo que suelo hacer es ver series que se
emiten los jueves, ya que levantarse con sueño un viernes es mucho más
llevadero que hacerlo cualquier otro día de la semana, especialmente si se
descansa el sábado y el domingo, como es mi caso.
Como
consumidor de series emitidas los jueves y atraído fundamentalmente por el
elenco, mezcla de españoles y mexicanos, me decidí a ver Fugitiva (Grupo Ganga para TVE).
Esta
que tenéis ante vosotros es mi primera crítica de una serie, para lo que voy a
guiarme un poco por el esquema que sigo para las críticas de las telenovelas, aunque cambiando algunas cosas. A
ver qué sale.
[¡CUIDADO! Si
estás viendo esta telenovela o tienes pensado hacerlo, quizás no deberías leer
esta crítica. Contiene spoilers que hacen aconsejable su
lectura después de haber visto la historia].
9 capítulos. Previsiblemente, temporada única.
Productores: Miguel Ángel Bernardeau (Grupo Ganga) y Mar Díaz (RTVE).
Directores: Belén Macías, Antonio Cuadri y Sergio Cabrera.
Guionistas: Joaquín Oristell, Yolanda García Serra, Laura León, Carlos Molinero, Pablo Bartolomé y Luis Caballero.
Emitida en La 1 de TVE entre el 5 de abril y el 7 de junio de 2018.
SINOPSIS Y TRÁILER
Ciudad
de México, 2017. Magda Escudero (Paz Vega) está casada con el poderoso empresario
mexicano Alejandro Guzmán (Julio Bracho), con el que tiene tres hijos: Paulina
(Arantza Ruiz), Claudia (Luisa Rubino) y Rubén (Iván Pellicer). De cara a la
sociedad son una familia modelo. Sin embargo, su realidad es muy distinta.
Magda vive sometida por Alejandro, que la maltrata y ejerce un profundo control
sobre sus hijos.
Cansada
de esta situación y aprovechando que su marido se encuentra de viaje de
negocios en Madrid, Magda huye de México con sus tres hijos simulando un
secuestro. Decidida a comenzar una nueva
vida en Europa, hace escala en Benidorm para que su madre y su hermano se sumen
a su particular huida. Es el comienzo de un arriesgado plan en el que todo
puede pasar.
PERSONAJES y ACTUACIONES
El
elenco fue lo que me llamó la atención de esta historia, con esa mezcla a priori tan curiosa de actores
españoles y mexicanos.
Personajes principales de Fugitiva |
Paz
Vega interpreta a la sufrida de Magda. Llevaba muchos años sin verla actuar,
desde la ya lejana Siete vidas.
Podría decirse que ha hecho un trabajo más que correcto teniendo en cuenta que
el personaje se encuentra muy poco perfilado. No es la típica protagonista
buena que no rompe un plato, pero tampoco es una mujer decidida, con carácter,
por mucho que se nos quiera vender lo contrario.
Julio
Bracho la acompaña en esta aventura como Alejandro. Alejandro es un Ricardo
Almenar (el personaje de Bracho en El
Chema). En una entrada que publiqué hace unos meses os decía que me parecía
un Ricardo Almenar un poco más comedido, pero no, es un Ricardo Almenar en
estado puro. No cabe duda de que a Julio se le dan más que bien este tipo de
personajes, villanos clásicos que matan, violan y hacen cualquier cosa para salirse
con la suya, aunque aquí los guionistas hayan metido al personaje en
situaciones un tanto patéticas.
Arantza
Ruiz, Luisa Rubino e Iván Pellicer interpretan a los hijos de Magda y
Alejandro. Los tres han hecho un buen trabajo, pese a que el guion ha querido
favorecer más al personaje de Arantza que a los otros dos hermanos. Han tenido
cierto feeling con Paz y mucha
química entre ellos, lo que sí que se ha notado en pantalla.
Del
lado de Alejandro se encuentra su madre, Esperanza, interpretada por Charo
López. Como personaje, Esperanza tiene los mismos escrúpulos que su hijo, es
decir, ninguno. Me ha gustado Charo, pese a un detalle que luego os comentaré.
Cerca de ella está José K, un personaje raro, muy loco, que juega a dos bandas
en todo momento y al que da vida Roberto Álamo. Lo defiende como puede, aunque
los motivos que llevan a José K a ser como es no quedan muy claros, pero ya en
entraré en ello más adelante.
Junto
a Magda se hallan Lander Otaola y Mercedes Sampietro, que se meten en la piel
de Edu y Nora, el hermano y la madre, respectivamente, de Magda. De nuevo,
personajes poco perfilados, especialmente el de Lander, aunque tanto él como
Mercedes los han sacado adelante sin problemas. También del lado de la
protagonista se encuentra el mejor personaje que tiene la historia: Tomás. José
Manuel Poga interpreta a este andaluz que le es fiel a Magda en todo momento,
pese a las decisiones incorrectas y absurdas que toma la protagonista en su
huida. Puede que sea el personaje que mejor configurado está, pese a que no sea
más que un buenazo que peca en ocasiones de inocente.
Completan
el elenco, entre otros, Odiseo Bichir, como Velasco, el enemigo acérrimo de
Alejandro; Felipe García Vélez, que interpreta al comisario Valdés y Mireia
Pérez, que se convierte en Luisa, la compañera de trabajo de Valdés.
[PERSONAJES
Y ACTUACIONES: 1,2/2]
TRAMAS
Tras
un primer capítulo potente, ágil y que despierta cierto interés, con ese
secuestro fingido como base para la huida de la protagonista y de sus hijos, la
serie comienza a desmoronarse por muchas razones.
Con un secuestro simulado comienza la historia |
La
primera, el espacio temporal en el que se desarrolla la historia, de apenas
noventa horas. No entiendo qué necesidad había de narrarlo todo en un espacio
de tiempo tan reducido, que hace, entre otras cosas, que la protagonista y sus
hijos viajen casi a la velocidad de la luz desde México a Benidorm. Pienso que buscaban
crear una sensación de agobio en el espectador con ese marco temporal tan
limitado o darle más agilidad a la historia, pero ni lo uno ni lo otro acabaron
consiguiendo.
La
serie es lenta, muy lenta. En los ocho capítulos que siguen al primero las
cosas van sucediendo casi a cuentagotas. Unido a ello, se generan en el
espectador expectativas que apenas se cumplen: por poner un ejemplo, el
encontronazo final de Alejandro con Velasco, José K y Magda se hace esperar
tres capítulos y lo que prometía ser un bombazo acabó siendo un petardo sin
apenas fuerza.
Yendo
ya al plano argumental propiamente dicho, se nota que esta serie no debería
haberse producido, o al menos, no ahora. La idea de base es buena e
interesante, pero el desarrollo es penoso, con infinidad de cosas que no
cuadran. No se entiende que Magda huya a Benidorm teniendo a su esposo en
Madrid, a tres horas en coche. Tampoco se entiende que huya a esa ciudad
costera, aunque lo haga simplemente como una escala en la que reencontrarse con
su madre y su hermano. Si a mí me tocara
huir de alguien al estilo de Magda no me refugiaría en una ciudad repleta de
gente. Me iría a un pueblo de esos casi abandonados que hay por toda España,
aunque solo fuese cosa de unos días, hasta reunir a la familia y escapar a
Europa.
Magda encañona a José K en una escena |
La
búsqueda que emprende Alejandro es muy curiosa. Para empezar, ni se le pasa por
la cabeza volver a México. Consiente que su madre envíe a José K y se queda
relativamente tranquilo en Madrid. Digo lo de relativamente tranquilo, porque
sufre un infarto que le lleva a estar en la UCI un par de horas, después de las
que aparece perfectamente, como un toro. José K comienza del lado de la familia
de Alejandro y luego se pasa al bando de Magda para acabar no se sabe con quién
y todo porque parece que siempre ha envidiado a Alejandro, ¿su hermano? Una
conversación entre Alejandro y su madre hace pensar que sí, que José K puede
ser una especie de hijo no reconocido o extramatrimonial de Esperanza. Esa
misma conversación lleva a pensar también que sea un amante de la madre de
Alejandro. Ninguna de las dos cosas queda clara, como tampoco el hecho de que
Alejandro hable con acento y expresiones del español hablado en México y su
madre se maneje en un español castizo, al nivel del que hablan en Burgos o
Valladolid. ¿Es hijo de madre española y padre mexicano? Tampoco nos lo
cuentan.
Alejandro, preocupado por no encontrar a su familia |
Os
decía en el apartado anterior que de los tres hijos de Magda y Alejandro es
Paulina la que tiene un mayor peso en las tramas y es así, con algunos momentos
díscolos o su primer amor. Rubén también da cierto juego, por el hecho de tener
un problema de audición y Claudia está por ahí, pero con escaso aprovechamiento
a nivel de tramas. Todos ellos hablan con acento mexicano, incluido Iván
Pellicer, que es español, aunque no con un acento tan marcado como el
Alejandro, quizás porque han querido mostrar en su forma de hablar la
influencia que puede ejercer el hecho de que su madre sea española.
La
historia cuenta con varias tramas secundarias que no aportan nada, como la del
matrimonio de recién casados que pasan su luna de miel en Benidorm y el marido
golpea a la mujer tras descubrirla siéndole infiel; el camarero-proxeneta del
bar del hotel en el que se alojan Magda y sus hijos; la limpiadora marroquí con
la que cuenta el hotel y los problemas que le da su hijo o la pareja de
comisarios que sigue a Alejandro y que tienen continuas discusiones entre ellos
que no conducen a nada.
Magda no lo tendrá fácil para huir |
Se
nota también un intento de tocar varios temas de interés, como la violencia de
género a través de Magda o la homosexualidad mediante Rubén, pero quedan en
eso, en meros intentos. En el caso de Magda además se intenta colar la lucha
feminista con reivindicaciones que el personaje hace casi siempre mediante voz
en off y que están fuera de contexto y pueden ser hasta contradictorias. Así,
por ejemplo, Magda se lamenta de en varias ocasiones de lo duro que es ser
mujer y valerse por sí misma, al tiempo que se apoya en José K para llevar a
cabo sus planes. Relacionadas con esto último se encuentran las intervenciones
de Magda al comienzo de cada capítulo en las que en voz en off y mientras
bucea, reflexiona sobre su vida. Como relleno están bien, pero más allá de eso,
de meter minutos al capítulo, no tienen otra función.
Da
la impresión de que los responsables de la serie pensaban que funcionaría y
habría una segunda temporada, de ahí que el final sea tan abierto como
decepcionante: todo queda tal y como estaba al principio, o casi, con Magda
fuera de España y sin que se sepa qué ocurre con Alejandro y José K. Teniendo
en cuenta las audiencias que se marcó, no creo que haya una segunda temporada
en la que aten esos cabos.
Dentro
de este cacao argumental, y para cerrar este apartado, solo salvaría una trama,
que sí que tiene su encanto: la historia de amor que surge entre Tobías y Magda
y que para mí termina de una manera totalmente injusta.
[TRAMAS:
1,8/5]
MÁS COSAS
Cabría
pensar que una serie como esta, cuya acción transcurre parcialmente en México,
se grabaría entre México y España. Pues no. Se ha rodado en su totalidad y
durante seis semanas en España. Ello provoca cosas tan raras como que en el
primer capítulo pretendan hacer creer al espectador que la estepa castellana es
un desértico paraje de México o que cuando enfocan la mansión de Alejandro en el
país azteca se vean vehículos que no se comercializan allí. Pese a todo, no es
algo que tenga mucha importancia y que casi que se compensa con las
localizaciones tan bonitas que nos ofrecen de Benidorm, con sus calas, sus
playas y sus parajes escarpados.
Paz Vega, junto a su madre e hijos en la ficción, en Benidorm |
La
serie tira de pocos decorados. De hecho los que hay se cuentan con los dedos de
una mano, y se corresponden, por ejemplo, con el piso del abogado al que acude
Magda y las habitaciones del hotel de Benidorm en el que se hospeda con sus
hijos, su madre y su hermano. El resto son todo escenarios reales: hoteles,
casas, el interior de un barco… Es un punto positivo.
En
general la realización está bien, aunque tiene algo que no me gusta en
absoluto: el uso de chormas para
representar la carretera en aquellas escenas en las que los personajes viajan
en coche. No es algo nuevo, ya que esta misma productora lo hace en Cuéntame, pero queda mal. Entiendo que
así se ahorran costes y se gana en seguridad, al no poner el coche en una
carretera real, pero el resultado es penoso. Pese a que el primer capítulo
hacer creer en que la serie tenga un amplio espectro de efectos especiales, al
final los pocos que hay son correctos, sin más.
Sí
que han acertado con el vestuario, muy acorde al estatus y a la situación que
viven los distintos personajes dentro de la historia.
También
con la musicalización, con buenos
soundtracks y un tema principal interpretado por Ana Guerra, muy acorde a
lo que es y a lo que pretende contar la serie. Lo tenéis encima de estas líenas
[MÁS
COSAS: 2/3]
Si
no la habéis visto y queréis hacerlo, la tenéis disponible en el servicio A la carta de la web de RTVE, al menos
para España.
Qué
queréis que os diga… La idea en sí no era mala, pero le faltaron muchísimas
vueltas a nivel de argumento y de personajes. Había que haberla trabajado mucho
más, o dicho de otra manera, estaba muy verde para salir. Es por ello por lo
que la historia hace agua en todo momento e incomprensiblemente parece pensada
para tener una continuación. Está bien que los responsables de la serie fuesen
tan optimistas como para dejar muchos cabos abiertos de cara a una segunda
temporada, pero la realidad de las series que se estrenan últimamente es otra y
es que, según mis cuentas, solo una de cada diez llega a ser renovada.
Si
la tenéis pensado ver, no os echéis para atrás por esta crítica. Al final, es
cuestión de gustos y la mejor forma de hacerse una opinión sobre una serie –telenovela,
película o lo que sea- no es leer críticas por ahí; es verla uno mismo.
-PUNTUACIÓN
FINAL: 5-
Comentarios
A mí sí me gustan las series españolas, pero este año por falta de tiempo no he podido ver muchas. He seguido con las que ya veía: La que se avecina, Cuéntame (esta solo la veo de vez en cuando) y Vis a vis, que la ha rescatado Fox dos años después de que Antena 3 la cancelara. El cambio de cadena le ha venido bien, ahora los capítulos duran 50 minutos y empieza a las 22:20 y con pocos anuncios, a las 23:20 ya está terminada, así da gusto ver una serie. De estrenos solo vi la mitad de Tiempos de guerra (me aburrió y la dejé, todas las tramas eran triángulos amorosos y el contexto de la guerra muy desaprovechado) y La catedral del mar, que me ha gustado y también ha tenido capítulos de 50 minutos (aunque esta empezaba a las 23:00). Al parecer, según han anunciado, a partir de enero de 2019 todas las series de Antena 3 van a durar 50 min, a ver si el resto de cadenas siguen el ejemplo, porque con Vis a vis y La catedral del mar he notado la diferencia para mejor, los capítulos se hacen mucho más entretenidos.
Así es. El primer capítulo es el mejor y el único medianamente soportable de esta serie que ha pasado sin pena ni gloria en audiencias y en la opinión de quienes la hemos visto.
Que poco a poco vayamos teniendo series de cincuenta minutos cada capítulo es una buenísima noticia. Espero que las pocas series veteranas que aún quedan (y lo digo especialmente por "La que se avecina"), también sean llevadas a esos cauces y dejen de rodar capítulos que parecen películas, de lo largos que son.
De las que mencionas, yo sigo "La que se avecina" desde el comienzo y también he visto "La catedral del mar", que en general ha sido bastante fiel a la novela. Solo le pondría una pega: los filtros de imagen que aplicaron a las escenas y que a mí personalmente no me gustan porque impiden apreciar muchas veces ya no solo colores, sino también pequeños detalles. En los últimos meses también he visto la T3 de "Merlí", "La casa de papel" y "Cuerpo de élite". Ahora ando con "Fariña" y a la espera de la T2 de "Estoy vivo".
Un saludo!