ME CHIRRÍA: Desaprovechando la publicidad

No estoy en contra de la publicidad que muchas telenovelas hacen de determinadas marcas. Lo hacen para financiarse y, como es lógico, a mayor financiación, más presupuesto y mejor resultado final. Sin embargo, pienso que esa publicidad podría usarse, además de para presentar algo al espectador o invitarle a comprarlo, para lanzar mensajes positivos.

Ved esta escena de “Eva la trailera” (Telemundo, 2016):

El galán, interpretado por Arap Bethke, sale de casa y se sube a su flamante ‘pick up’ Toyota, último modelo, que tiene una pantalla táctil en la consola central que funciona como navegador. Se encargan de mostrarnos el modelo, su diseño y ese navegador fabuloso con el que cuenta. Eso, en esta escena. Hay otras muchas en las que, aprovechando el devenir de los acontecimientos, el espectador se entera de otras funciones con las que cuenta este vehículo, como su enchufe o su moderno sistema de arranque.

Hacen tan bien la publicidad del coche que es inevitable que el espectador no se fije en él. Sin embargo, no todo es oro lo que reluce…

Para empezar, sabiendo que la telenovela se exportará, como ocurrió, a muchos países de Hispanoamérica y Europa, Toyota, una marca con proyección mundial, opta por un Tacoma, un vehículo que solo se fabrica para Estados Unidos y México.  Un vehículo que sí, es una pasada, pero que tiene un consumo de entre 9 y 13 litros por cada 100 kilómetros, según versiones y uso, y que en los últimos años encabeza las listas de vehículos que más emisiones de CO2 generan.

Pese a ello, el Tacoma es uno de los coches más vendidos en Estados Unidos. Y quizás por eso, y porque en aquel entonces veía la luz la nueva versión, decidieron hacer publicidad de este modelo en la telenovela.

Seguramente, gracias a la telenovela, habrán conseguido vender algún Tacoma y sí, la estrategia pudo haberles salido medianamente bien. Sin embargo, pienso que se equivocaron al promocionar este modelo. Vivimos en un mundo que poco a poco va tomando conciencia de que es necesario contaminar menos, coches incluidos. Toyota lleva años apostando por los híbridos, con dos motores, uno de combustión y otro eléctrico, que dan como resultado vehículos de bajísimas emisiones, ya que tiran del motor eléctrico todo cuanto pueden y solo se apoyan en el de combustión si con el eléctrico no es suficiente. No hacen apenas ruido, tienen un menor mantenimiento que los coches al uso y, lo más importante, son muy poco contaminantes.

Se fabrican en todo el mundo y en Estados Unidos hay una amplia gama. ¿Por qué Pablo no puede conducir un Prius o un RAV4 Hybrid y dar una imagen de galán igualmente elegante, pero concienciado con el medioambiente? ¿Por qué no aprovechar la ocasión para mostrar a los espectadores las ventajas de esos coches híbridos y conseguir vender alguno, no solo en Estados Unidos, sino también en otros países donde la marca está presente? Sinceramente, perdieron una oportunidad fabulosa de lanzar, a través de la publicidad, ese mensaje positivo, que pasa porque el futuro está necesariamente en coches que tiendan a las cero emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera.

Espero que el género, igual que reflejó otros avances tecnológicos, también refleje algún día el tema de los vehículos eléctricos o híbridos, que, poco a poco, al menos en España, van abriéndose camino. Como siempre, el tiempo dirá…