Hace
más o menos un año se mudó a mi comunidad Elena, una señora mayor, de setenta y
cinco años para arriba. Viuda. Venía de un pequeño pueblo, en el que tenía un
bar. Tiene dos hijas, una de las cuales la acude a ver todos los días. La
señora en cuestión tiene a su vez un yerno, José, que se comporta con ella de
una forma poco usual, o al menos, poco común: no tienen la relación
suegra-yerno o yerno-suegra en la que todos pensamos cuando oímos cualquiera de
esas palabras.
El
yerno la acude a buscar, la lleva a comprar, agarrada de su brazo, la lleva a
tomar algo en las vinotecas de la zona y la besa cariñosamente (en la cara, por
supuesto) al despedirse.
Tal
relación no pasó desapercibida para ninguno de los vecinos… Ni en mi propia
casa. Lo comentábamos hace unos meses, sorprendidos, como muchos otros vecinos
de la magnífica relación que mantiene la señora con su yerno. Diversas
hipótesis se me vinieron a la cabeza para justificar ese cariño mutuo entre
suegra e hijo político:
I.
Puede ser su tía (quizás José es hijo de uno de los hermanos de Elena y se casó
con su prima, algo que se ve bastante a menudo especialmente en la zona rural).
II.
Dando la vuelta a lo anterior, José puede ser sobrino del difunto marido de
Elena.
III.
Puede ser que José fuese vecino del mismo pueblo en donde vivía Elena y en el
que crecieron sus hijas (y al crecer se enamoró de una de ellas).
IV.
Es posible también que José fuese hijo de un pariente lejano de Elena, y que
tras quedase huérfano de niño, Elena se encargase de sacarlo adelante (y
convivir con la hija de Elena dio paso al amor).
V.
Quizás José trabajó en el bar de Elena, donde conoció a su hija, enamorándose
perdidamente de ella.
Cinco
hipótesis que vendrían a justificar la relación ejemplar entre yerno y suegra. Ocurrir
se me ocurrieron y ocurren muchas más, pero hay algunas que no se pueden
contar. Quizás la última que se ocurrió fue la más sencilla: José es un tipo
noble, de buen corazón, que se preocupa por cuidar de la que es la madre de su
esposa. Sin más.
¿A
qué viene todo esto? Podrá parecer cotilleo, pero es un simple ejemplo con el
que quiero poneros de manifiesto algo que solemos tener los que vemos
telenovelas: una imaginación desbordante. Somos capaces de imaginar cosas, a
veces disparatadas, como algunas de las anteriores… ¡Pero eso es algo
estupendo! ¿Habrá algo mejor que tener una imaginación poderosa, que nos
permita crear hipótesis sobre cualquier cosa? Puede pareceros una chorrada,
pero es algo estupendo, de lo que deberíamos vanagloriarnos.
Una
cualidad, si así quiere verse, que se desarrolla leyendo, viendo películas o
telenovelas. Que dejemos volar nuestra imaginación gracias a estas historias
nos permite después dejarla volar respecto de cualquier cosa que nos ocurra en
el día a día, por intrascendente que parezca, como esto que os contaba. No soy
el único… Recordad sino qué pensó Quasi, nuestro viejo conocido, cuando su enamorada lo rechazó.
¡Presumamos
de imaginación, caramba!
P.D. La viñeta que acompaña al artículo pretende reflejar esto que os estoy contando, en relación a los libros: cómo leer nos hace volar la imaginación. Lo considero plenamente aplicable a las telenovelas.
P.D. La viñeta que acompaña al artículo pretende reflejar esto que os estoy contando, en relación a los libros: cómo leer nos hace volar la imaginación. Lo considero plenamente aplicable a las telenovelas.
Comentarios
Que gracia con el yerno- suegra! Jaj. No es normal para nada...que la acompañe o le compre si, claro...pero tanto cariño, que raro...
Mi suegra que es mas buena que el pan, y yo no comporto así, educadamente, pero no te sale, como con tus padres...y sí, es la verdad..
Pues chico chapeau para el yerno, tambien a lo mejor lo crió de pequeño o algo de lo que has dicho, puede ser!
Pues bendita imaginación...que fluya, que bueno!
Y Quasi no se le murió la chica? Ay....ya me he perdido..jaj
Buen domingo!
@Tessa... No es normal y nos tiene a todo el bloque un poco en plan... "¿Qué relación tendrán?". Nunca he conocido un yerno que tanto quiera a la suegra como a este señor.
A Quasi creo que no se le murió la chica: lo rechazó (y él casi se muere del disgusto). Igual por ahí te me perdiste jajaja
@Leda... Prometo informaros de cualquier cosa que sepa. Me alegra que te gusten estos 'posts' que son más informales y que aunque conectan con las telenovelas lo hacen un poco sobre cuestiones generales.
Un saludo!