Y "La esclava blanca" llegó a su fin en TPA...

El pasado 4 de octubre, siete meses después de su estreno, finalizaba en TPA, mi autonómica, “La esclava blanca” (Caracol, 2016). Como os comenté en abril, me decidí a volver a verla porque me venía bien el formato elegido para su emisión, semanal, con episodios de una hora y veinte minutos de duración.
Se me hacía fácil seguirla de esta forma, aún cuando no las tuve todas conmigo tras el cambio de horario que sufrió a las tres semanas de comenzar, pasando de emitirse a las 22.15 h. para hacerlo una hora más tarde, a eso de las 23.20 h. Parece ser que la audiencia respondió y pese al cambio, consiguió moverse entre el 4 y el 5% de ‘share’. No son malos datos para una televisión cuya media mensual en contadísimas ocasiones supera, precisamente, el 5% de cuota de pantalla. Ello sin olvidar que seguramente tendrá un coste mucho menor que programas de producción propia con peores audiencias, como “Clave de fondo”, o “Pieces”, emitidos de madrugada.

No me perdí ni un capítulo, y estando de vacaciones tuve que verla a través de una web pirata, ya que TPA no la emitió ‘online’ ni colgó sus capítulos en su web, supongo que por cuestiones de derechos de emisión.
¿Es fácil seguir una telenovela de 61 capítulos de una forma tan dosificada? Sí, aunque ha habido veces en las que se ha hecho pesado. Daos cuenta de que cada episodio semanal eran dos, solo dos, de los que tiene la telenovela. Es decir, TPA y el resto de cadenas autonómicas que la han emitido en España han echado dos capítulos a la semana frente a los cinco semanales de su emisión original en Caracol o de la que tuvo, por ejemplo, en Estados Unidos a través de Telemundo. Adaptar un producto pensado para ser emitido de una forma a otra tan distinta afecta al ritmo, para qué negarlo. Lo mismo pasa con el tiempo: en emisión diaria de un capítulo hubiese permanecido en antena unos tres meses. De esta forma han sido siete. Es lo que tiene ‘seriarizar’ una telenovela…
Más inconvenientes. Los episodios semanales equivalen, en duración, a dos capítulos, aunque no se corresponden con dos capítulos exactos, lo que provoca que los episodios terminasen, a menudo, con escenas sin relevancia. Han hecho un buen trabajo con los avances de próximos capítulos, pero no con los recuerdos de anteriores episodios, que a veces han sido eternos. Por cuestión de calificación para edades (tenía un +12, cuando, para mí, debió ser un +16), se han cortado ciertas escenas de tipo sexual y otras como la muerte del doctor López, que es muy explícita. Se han respetado, en cambio, todas las escenas de torturas y maltrato hacia los esclavos.
Lo mejor de la experiencia, para mí, ha sido verla en una definición óptima (que no en alta definición, ya que TPA lleva varios años con un canal para emitir en HD pero en el que solo emite una carátula con un rótulo que dice algo así como "emisión en pruebas"). Esa mejor definición me ha permitido apreciar y disfrutar de los paisajes, colores y diversos detalles que no pude ver la primera vez, al descargármela de internet en una calidad algo más baja.
Me lo advertía Steven hace tiempo, y he podido comprobarlo: en el final que yo vi hace unos días hay, al menos, una escena que no aparece en el capítulo final original, el emitido en su día por Caracol. No entiendo por qué, ya que es una escena bonita, de Miguel y Victoria, sin nada censurable. 

Esta fue la primera telenovela que TPA emite en muchos años, y la tercera en su historia, tras “Gata salvaje” (Venevisión, 2002) y “Calypso” (Venevisión, 1999). Salvo esos detalles que os comentaba, la han emitido bastante bien. La promocionaron prácticamente todos los días mientras estuvo en antena en los distintos cortes publicitarios y el día del final el programa "De hoy no pasa", el 'magazine' de la tarde, le rindió un pequeño homenaje, con los presentadores vestidos como los personajes de la telenovela y una guapísima Arantxa Nieto emulando ser Victoria Quintero. 
Parece ser que la FORTA (red de televisiones autonómicas de España) se ha hecho con los derechos de “Pablo Escobar” (Caracol, 2012), que ya emite Canal Sur, con buena audiencia, pese a que fue emitida parcialmente por Intereconomía a nivel nacional, hace ya algunos años. También con el mismo formato 'serializado' que “La esclava blanca”. ¿Podría funcionar en TPA? Por probar, no se pierde nada… Ahí lo dejo. 

Volviendo a “La esclava blanca”, a nivel personal, nada tengo que añadir o quitar de la crítica que publiqué sobre esta historia hace ya algo más de un año, tras verla la primera vez. Una gran historia que ojalá haya servido para que mi autonómica se anime a apostar por el género, teniendo en cuenta esta experiencia, que creo que, en líneas generales, ha podido resultarles positiva. 

Comentarios

Altair ha dicho que…
Hola Gafemo!!
Aquí en Castilla-La Mancha terminó en agosto y el espacio que ocupaba La esclava blanca lo están rellenando con series. Pusieron una miniserie gallega de 4 capítulos, Dalia la modista. Ahora han puesto una francesa, Una aldea francesa. No sé cuando termine esta serie, si pondrán la que dices, la de Pablo Escobar u otra telenovela. Pero si canal sur la está emitiendo, pronto lo hará Castilla-La Mancha.

Saludos!!
tessa ha dicho que…
Gafemo yo cuando estoy de vacaciones y estoy muy engachada, estoy en el hotel o apartamento a la hora puntual y el marido fastidiado, pero bueno ya se pacta antes de salir de casa. Esto es igual que el Tour para el, así compensamos...
Respecto a " la esclava blanca " han quitado las escenas sexuales y han puesto el maltrato y torturas???
Pues vaya..no es mejor quererse que matarse a golpes???
Así vamos!!!
Saluditos